Los representantes sindicales de la empresa pública de limpieza (Soliarsa) han roto el acuerdo previo al que se había llegado con el Ayuntamiento de cara a establecer el nuevo convenio colectivo para los trabajadores, así como la nueva Relación de Puestos de Trabajo (RPT), después de que éstos hayan exigido mayores retribuciones y no prestar sus servicios de limpieza en la ciudad durante los fines de semana.
Según han informado fuentes municipales a este periódico, cuando ya estaba prácticamente cerrado el acuerdo, los representantes sindicales reclamaron a última hora más dinero para los trabajadores y quedar exentos de carga de trabajo durante los fines de semana. Unas exigencias que no pudieron ser asumidas por el Consistorio.
Así las cosas, en estos momentos no existen vías de entendimiento entre el Ayuntamiento y los trabajadores de Soliarsa, y las negociaciones se encuentran prácticamente paralizadas en estos momentos, y sin visos de solución. Las mismas fuentes han matizado que se presenta «muy complicado, por no decir imposible», que se pueda alcanzar un nuevo acuerdo para firmar el convenio colectivo en la empresa pública de limpieza.
Hay que recordar que días atrás la concejal delegada de Soliarsa, Maricarmen Martínez, afirmó que durante las negociaciones se estableció una subida salarial de hasta 3.000 euros por cada empleado, lo que suponía un incremento global y anual de esta partida de más de 150.000 euros, entre otros 27 puntos de mejora que el Ayuntamiento asumía con asuntos relacionados con condiciones laborales e incluso relacionadas con la salud, igualando condiciones de trabajadores de distintas categorías y otras condiciones.
Mientras tanto, los responsables sindicales, en un comunicado emitido, apuntan a que con la postura del equipo de Gobierno, y las últimas declaraciones de Martínez, “podrían generar un clima de confrontación que perjudicaría a toda la ciudad”, dando a entender que de no alcanzarse un acuerdo satisfactorio podrían poner en marcha acciones de protesta.