Es un mamífero insectívoro, es decir que en su dieta incluye abundantes insectos. Su característica principal es que tiene todo el cuerpo, con excepción del vientre, recubierto de púas que miden sobre 1 mm. de grosor por 2 ó 2,5 de largo.
Su aspecto es algo aplanado, macizo, rechoncho y pesado, llegando a alcanzar los 1.100 gr. de peso y a medir entre 22 y 29 cm de longitud total incluida la cola. No tiene cuello y en su cabeza, los ojos son salientes muy oscuros y pequeños, las orejas redondeadas y cortas, menores que la distancia que existe entre el ojo y el hocico, que es puntiagudo. Sus patas son cortas y poseen 5 dedos cada una y están provistas de fuertes uñas. La cola también es corta.
Los machos son mayores que las hembras, tienen el vientre de un color que varía entre el pardo oscuro y el pardo amarillento, mientras que el de las hembras es color ceniza.
Su dentadura consta de un total de 36 piezas, teniendo arriba 6 incisivos, 2 colmillos, 6 premolares y 6 muelas, y en la mandíbula de abajo, 4 incisivos, 2 colmillos, 4 premolares y 6 muelas.
Las huellas tienen 5 dedos y uñas generalmente largas. El pulgar no suele marcarse. Tanto la delantera como la trasera miden unos 2,5 cm. Su paso suele ser andando y más raramente el trote.
Los excrementos son similares a los de gato doméstico, pero en los de erizo se aprecian restos de insectos, como patas, cabezas, élitros, antenas, trozos de caparazón de caracol, etc.
Suele vivir en zonas boscosas y sus bordes, lugares con matorral y monte bajo, arbustos, setos. También puede verse en zonas de cultivo, lugares pedregosos. En la Serranía de Ronda se puede ver en las cercanías de los pueblos, incluso de Ronda ciudad, en general en lugares que no sean muy fríos ni húmedos. En invierno puede utilizar construcciones humanas para protegerse del frío.
Son territoriales variando la amplitud según el alimento disponible, puede oscilar entre 5 y 100 hectáreas
En la Península Ibérica el erizo ocupa todo el territorio, compartiendo parte del mismo con su pariente el erizo moruno, que ocupa una estrecha franja a lo largo de toda la costa mediterránea,
No figura como especie amenazada en España pero sí aparece en al Capítulo III del Convenio de Berna, debido a que su supervivencia podría verse amenazada de no adoptarse medidas especiales.
El índice de mortalidad causado por el hombre es alto, tanto en atropellos como al eliminarlo por creerlo perjudicial para la caza. También es frecuente que muera envenenado por el uso de pesticidas.
En su reproducción generalmente tiene dos periodos de celo, uno entre mayo y junio, y el segundo entre agosto y septiembre. En esta fase del ciclo reproductivo, tiene lugar la parada nupcial, que se asemeja a una pelea entre machos, que siguen a la hembra con el hocico pegado a la cola. El cortejo puede ser muy largo hasta de dos horas.
La gestación o periodo de embarazo dura de 35 a 40 días y al finalizar ésta tiene lugar el parto, en el que pueden nacer de 2 a 10 crías.
Las crías, que nacen con los ojos cerrados, desnudas y de un color rosáceo, miden en ese momento de 6 a 9 cm y pesan de 11 a 25 gr. Mamarán durante unos 20 días. A los 3 días disponen ya de unas espinas duras de color blanco, y a las 2 semanas abren los ojos, momento en que suelen pesar unos 70 gramos. A los 20 días dejarán de mamar y a partir del mes de vida, ya acompañan a la madre en sus salidas. A partir de las 5 ó 6 semanas se independizan, y para cuando llegue el invierno deberán alcanzar los 400 gramos de peso.
La madurez sexual que es la edad a partir de la cual pueden reproducirse la alcanzan a los 10 meses aproximadamente. Caza y come insectos y sus larvas, cienpies, milpies, caracoles, babosas, lombrices de tierra e incluso se atreve con ranas, ratoncitos, lagartijas, culebras y víboras. Esta dieta se complementa con huevos y polluelos de aves que anidan en el suelo, bellotas, bayas y otros frutos.
Su actividad la desarrolla fundamentalmente de noche y puede ser visto desde el atardecer al amanecer. Durante el día se cobija en nidos construidos por hojarasca, pelo, hierbas, etc. Y los sitúa en la base de matorrales densos. Dispone de varios nidos distribuidos dentro del territorio, cambiando frecuentemente de nido.
Su olfato está muy desarrollado, camina mucho y sabe nadar muy bien.
Su defensa en enroscarse como una bola para presentar sus púas por todos los flancos.
Los erizos viven entre 7 y 10 años, presentando una mortalidad del 60% durante el primer año de vida.
Los machos, son agresivos y posiblemente territoriales.
Desde el mes de octubre hasta abril, dependiendo del clima (normalmente cuando la temperatura baja de los 10 grados), los erizos tienen un periodo de reposo llamado hibernación, entrando en ese periodo los machos antes que las hembras, y por último los ejemplares jóvenes.
Suele salir a buscar alimento después de que empiece a llover, siendo frecuente verlo entre los matorrales del bosque.
Su principal enemigo es el hombre que con sus vehículos los atropella por millares. Otros enemigos son los perros, el zorro, el tejón, las águilas y los búhos. Las crías son presa de culebras y tejones.
La foto es del excelente naturalista Gonzalo Astete a quien agradezco que me haya permitido su uso.
Bibliografía: https://www.faunaiberica.org