Tarde agradable, una ligera brisa acompañaba a los numerosos vecinos que se habían congregado para vivir uno de los momentos más esperados del año en la barriada de San Cristóbal: la salida en estación de penitencia de la Hermandad de Nuestro Padre Jesús del Prendimiento, María Santísima del Rosario en sus Misterios Dolorosos y San Juan Evangelista.
Tras la Cruz de Guía y la primera fila de nazarenos abría el cortejo el paso de misterio, con ese Jesús tirado por un caballo y pensando en lo que aún le queda por sufrir. Se mueve lento, a momentos más rápido, lo que levanta los aplausos del público. Todo ello bajo los sones de la Banda de Cornetas y Tambores Fe y Consuelo de Martos.
En los balcones cuelgan grandes fotografías de los dos titulares, que los vecinos han sacado para incrementar aún más este momento cofrade.
Pasan pocos minutos y vuelven a escucharse aplausos, desde uno de los laterales de la parroquia inicia su camino el paso de costaleros de María del Rosario, donde a pesar del viento las velas se resisten a apagarse. Y es que quieren dar toda la luz del mundo a al rostro bendecido de la Virgen.
Marcha con el paso de palio la Banda de Música de Álvarez Quintero de Utrera, interpreta sus marchas con pasión para la Señora, y eso los costaleros, que acomodan su caminar a los sones de trompetas y tambores.
Otro momento cofrade para la historia en un Domingo de Ramos en Ronda.