La nueva ola de calor obliga a buscar precauciones para no tener problemas que puedan afectar a la salud. En gran parte de la península se están registrando temperaturas superiores a los 35 grados y, en algunos casos, exceden la barrera de los 40 hasta llegar a los 45.
Las elevadas temperaturas, además, vab de la mano con la subida del precio de la luz. El precio promedio ha subido estos días de los 300 euros por megavatio hora (MWh) para aquellos usuarios que tengan una tarifa regulada y, por tanto, estén vinculados al mercado mayorista.
Ante este panorama, es importante llevar a cabo trucos para sortear este clima extremo y al mismo tiempo no arruinarnos por encender aires acondicionados o hacer reformas para aclimatar un hogar y aislarlo del calor. Por esta razón proponemos los siguientes consejos.
Una de los primeros trucos que hay que seguir para mantener el hogar en un ambiente fresco es ventilarlo a primera hora de la mañana, cuando las temperaturas son más bajas. Es importante abrir las ventanas y las persianas hasta arriba en la zona fría de la casa y dejarlas más cerradas en la parte caliente, donde da más el sol.
Cuando las temperaturas comiencen a subir y el sol se encuentre de manera más contundente desde el cielo, es el momento de cerrar ventanas, bajar persianas y tener las cortinas cerradas. Así conseguiremos aislar la vivienda y evitar que el calor acceda de forma rápida.
Las plantas pueden ser muy útiles, pues pueden ser un buen escudo contra el sol. Situar macetas o enredaderas en ventanas y en la fachada de una vivienda provoca que el sol no pegue directamente en las paredes y que las hojas y las flores absorban el calor. Asimismo, en el interior permiten refrescar el ambiente.
Y este es un truco para refrescarse rápidamente y de manera muy barata. Aunque en este caso hay que tener un ventilador, que puede ser de pie o de suelo. Si se sitúa delante del aparato un recipiente con hielo y sal, el aire que generará será más fresco y no solo removerá el aire caliente.
