Tras dos años de espera este Domingo de Ramos, ante un gentío que llenaba la plaza, las campanas de la parroquia de San Cristóbal han vuelto a repicar por todo lo alto para anunciar a todos los rondeños que, por fin, la Hermandad de Nuestro Padre Jesús del Prendimiento, María Santísima del Rosario en sus Misterios Dolorosos y San Juan Evangelista iniciaban su estación de penitencia.
Con algo de viento de levante, pero con una tarde agradable, a las 17.00 horas se habría la puerta del templo y tras la Cruz de Guía aparecía la fila de nazarenos, al tiempo que a pocos metros sonaba el himno de España, anunciado a los presentes que ya, El Prendimiento estaba en la calle. Olor a incienso, flores en el aire y aplausos recibían a uno de los titulares de una de las hermandades más jóvenes de Ronda, pero con todo un acervo religioso a sus espaldas, desde sus inicios.
El acompañamiento musical del paso de Misterio ha corrido a cargo de la Banda de Cornetas y Tambores de la Banda del Gran Poder de Coria del Río, mientras que para el paso de palio se ha contado con las marchas de la Banda de Música de El Saucejo.
El principal estreno de este año de esta hermandad rondeña es que tras realizar su estación de penitencia ha regresado por primera vez a su templo, en lugar de recogerse en el centro, un hito que sin lugar a dudas marcará la historia de esta cofradía.