Casi mil efectivos y más de medio centenar de medios aéreos luchan ya contra el fuego declarado el pasado miércoles 8 de septiembre en Sierra Bermeja (Málaga) con los recursos de otras comunidades autónomas plenamente integradas en el operativo de extinción. Durante la noche los efectivos han podido trabajar en todos los frentes. De hecho, el director del Centro Operativo Regional (COR) del Infoca, Juan Sánchez, ha explicado que, desde la máxima prudencia, «se empieza a ver la luz al final del túnel» después de que en la noche del domingo al lunes las condiciones climatológicas permitieran que el trabajo de los profesionales por primera vez cundiera y ha confiado en que «en los próximos días se pueda estabilizar el incendio».
El incendio cuenta en la actualidad con una superficie de 7.780 hectáreas y unos 90 kilómetros de perímetro. A esta hora, un total de ocho carreteras siguen cortadas al tráfico y desde el operativo se pide que se eviten los desplazamientos en las zonas más próximas al incendio.
Sánchez ha destacado que la mayoría de las acciones desarrolladas durante la madrugada han sido «muy positivas», aunque otras no hayan podido ejecutarse. «El incendio nos ha dado esta noche una tregua, con un viento constante de dirección sureste. La borrasca que se aproxima nos aporta humedad pero también viento. Estos ha permitido trabajar en la zona norte con aplicación de fuego técnico y fijezas con líneas de agua. No obstante, nos ha impedido trabajar en la zona suroeste, porque el viento lo iba empujando. Ésa es la prioridad ahora», ha señalado el director del COR. Falta por sellar una parte de la zona este en la que trabajan las brigadas especializadas del Ministerio y de la Junta de Andalucía.
En la noche del domingo 12 regresaron a sus casas más de mil personas, aunque siguen desalojadas 1.616 personas. Ninguna de ellas ha tenido necesidad de pernoctar en los espacios habilitados porque lo han hecho en hoteles y albergues que se han ofrecido a acogerlos. En la actualidad, la zona más activa del incendio es la de municipio de Casares, sin que «ahora mismo» haya riesgo inminente de desalojos porque el fuego no avanza hacia las viviendas. Los trabajos a lo largo de toda jornada permitirán decidir si es viable la vuelta de más personas a sus viviendas.
En las próximas horas se esperan lluvias que ayudarán a que mejoren las condiciones, pero que no van a sofocar el incendio porque «la cantidad de agua que esperamos no llegará al suelo por los frentes de llamas existentes». De hecho, una de las complicaciones añadidas de los bomberos forestales está siendo ya la falta de agua física en el terreno, porque «estamos acabando con las balsas y nuestros medios aéreos tienen que hacer colas de carrusel para seguir tirando agua». «Al final, tener más medios genera más problemas de logística», ha subrayado Sánchez, que ha destacado el «trabajo ejemplar» desarrollado por los grupos de intervenciones procedentes de otras comunidades autónomas y del Estado. «Confiamos en poder dar pronto buenas noticias, por ahora los trabajos funcionan», ha enfatizado.
Un grupo de expertos para la restauración
Por su parte, la consejera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, Carmen Crespo, ha explicado que el Gobierno andaluz, en coordinación con los alcaldes de la zona afectada por el incendio, «ya estamos planificando las tareas previas para que en cuanto se dé por extinguido podamos empezar a trabajar en la recuperación del terreno», primero con una actuación de emergencia y, posteriormente, con la elaboración de un estudio de reforestación con un grupo de expertos y un comité técnico.
El grueso del pinsapar, la zona de mayor valor ecológico, «no está afectado» y «se está intentando proteger al máximo». Crespo ha explicado que «la afección se ha producido en la zona más cercana a los pinos y que el grueso está en buenas condiciones, aunque habrá que esperar a que se dé por extinguido el incendio» para hacer una valoración exacta.
La responsable en materia de Desarrollo Sostenible ha advertido que es necesario que las personas ocupen la zonas rurales «siempre que se preserve el medio natural», una cuestión en la que ayudan tanto la ganadería extensiva como la selvicultura, así como una necesaria inversión en el mantenimiento de cortafuegos. En este sentido, Crespo ha recordado la inversión de 85 millones de euros que realiza la Junta de Andalucía a lo largo del año.
Por último, Crespo ha tenido un recuerdo por el bombero fallecido, cuyo funeral tuvo lugar el día 12. «Es un héroe que ha dado su vida por Andalucía», ha subrayado. Y ha señalado que los dos heridos evolucionan de forma favorable: «Uno de ellos ha sido dado de alta y el otro está a la espera de una prueba».
Bendodo: «Este incendio inédito se estudiará en el futuro»
Por su parte, el consejero de la Presidencia, Administración Pública e Interior, Elías Bendodo, se ha mostrado convencido de que este incendio inédito se estudiará en el futuro «para poder abordarlo con más eficacia si se vuelve a repetir».
Tras destacar que a lo largo de la quinta noche de trabajo contra el incendio los efectivos «han podido entrar con profundidad en las cuatro áreas de trabajo planificadas», ha precisado que ya son 7.780 las hectáreas afectadas y que los medios que trabajan en la zona se han multiplicado, tanto los medios personales como los aéreos, con casi mil efectivos y 51 aeronaves. Han llegado apoyos de Madrid, Castilla-La Mancha, Murcia y Extremadura.
Bendodo también ha subrayado que la coordinación que están demostrando todas las administraciones, desde la Junta de Andalucía, el Gobierno de España, la Diputación provincial, todos los ayuntamientos, los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, Protección Civil o Cruz Roja, «ha sido perfecta».
Por último, el consejero de la Presidencia ha querido destacar el papel, la profesionalidad y el compromiso de los trabajadores del Infoca, «de los que estamos muy orgullosos por su esfuerzo ímprobo».