Los efectivos de tierra del Plan Infoca, unas 300 personas, han tenido que retirarse por la nube de fuego, o pirocúmulo, que hay encima del incendio forestal de Sierra Bermeja, que se declaró este pasado miércoles. Esta decisión se ha tomado al constatarse la peligrosidad de este fenómeno llamado pirocúmulo, que consiste en una nube de humo con gran cantidad de brasas, lo que es muy peligroso para los efectivos que trabajan en tierra. Además, se ha ordenado el confinamiento de la población en los municipios de Genalguacil y Jubrique.
¿Qué es un pirocúmulo?
Los pirocúmulos o nubes de fuego se producen cuando la temperatura se eleva en el aire debido a la intensidad del fuego. Suelen ser habituales en los grandes incendios forestales y en erupciones volcánicas, produciendo una columna de humo mezclado con brasas incandescentes muy peligrosas para los servicios de extinción y que aumentan el riesgo de extender el incendio a zonas inicialmente apartadas.
El humo se eleva de forma densa hasta que se estabiliza con la humedad, provocando como una ‘boina’ de humo y brasas que cubre una amplia extensión sobre el incendio, por lo que es muy difícil que se disperse. Su forma suele recordar al hongo nuclear de las bombas atómicas.
Al ser grandes nubes producidas por el humo de los incendios, los pirocúmulos tienen tanto poder calorífico que siguen subiendo con mucho material encendido, el cual puede llegar tan alto que choca con el frío, derrumbándose y volver a caer a la superficie. Desde el punto de vista de la gestión de riesgos, esto es extremadamente peligroso, porque dicho material encendido y transportado por estas nubes pueden extender los incendios forestales y caer en lugares habitados.
Puede ocurrir que, si hay mucha humedad en el aire, se condense y provoque lluvia que ayude a extinguir el fuego. Sin embargo, el viento de terral que afecta a la costa desde el miércoles aleja esta posibilidad, ya que ha resecado el ambiente.
Condiciones adversas
Las condiciones adversas siguen dificultando las labores de extinción del incendio «complejo», por el que se ha declarado el nivel 2 del Plan de Emergencias ante Incendios Forestales de la Comunidad Autónoma (Plan Infoca), dada la virulencia del fuego, que ha obligado al desalojo de más de 1.000 personas y se ha cobrado la vida de un bombero forestal.
El Plan Infoca se esfuerza en contener las llamas para impedir que siga «devorando» más masa forestal. Este incendio tiene unas condiciones extremas «que hacen inútil casi cualquier actuación».
Desde la Dirección de Extinción del Plan Infoca han explicado que los trabajos de este viernes se están centrando en confinar el incendio para evitar que el fuego siga avanzando. Se trata de evitar que adquiera más potencial y siga afectando a más masa forestal.
Tras la declaración del nivel 2 para el incendio forestal, que afecta a unas 3.600 hectáreas, la dirección regional del Centro Operativo Regional ha asumido el mando y ha reforzando el operativo, que continúa la lucha contra las llamas.