Tras años de experiencia en el fotoperiodismo trabajando para diferentes medios de comunicación y publicando en distintos periódicos provinciales como Málaga hoy, Sur y La Opinión de Málaga o revistas y agencias de tanto prestigio como Interviú o AP, el fotógrafo rondeño, Javier Flores, decidió emprender una nueva línea de negocio con la puesta marcha de una empresa dedicada a la fotografía social y de empresas.
Desde entonces el crecimiento ha sido progresivo y un importante número de clientes han confiado en este fotógrafo para realizar diferentes tipos de reportajes y elaborar material gráfico para la promoción de sus empresas.
Bodegas como Pasos Largos, Cortijo Los Aguilares, Bodegas Lara o la gaditana Tesalia han confiado en este profesional rondeño para realizar diferentes trabajos, y es que el mundo del vino es una de sus especialidades. A ellas se suman otras como Radio Coca Ser, empresa con la que realizó las coberturas de los conciertos de la cadena Radiolé, unos eventos que reunieron a artistas de primer nivel y a miles de personas.
También ha realizado diferentes trabajos para empresas que se dedican al sector turístico, tanto de restauración como de alojamientos, a las que se unen otras como el despacho de abogados malagueño García de la Vega o la firma de bolsos Lola Jiménez. Son solo algunos de sus trabajos, ya que otros muchos clientes particulares e instituciones públicas también le han realizado encargos de asuntos muy diferentes.
“La fotografía de empresa me apasiona porque, en líneas generales, es muy creativa, y es que todo el proceso para crear una sesión de trabajo es apasionante y es muy importante tener una buena conexión con el cliente y poder darle aquello que quiere y necesita”, explica.
En cuanto a la fotografía de eventos y social, hace años que trabaja en el sector para aquellos clientes que se han sentido identificados por su estilo y le han requerido sus servicios para recoger momentos tan especiales.
“Hace unos años que la tendencia en el mundo de la fotografía de boda se fijó en el modo de trabajar que tenemos los fotoperiodistas y se hizo tendencia, hasta el punto de que en actualidad es una de las formas más habituales de trabajar. Captar el momento sin intervenir en el mismo, contar lo que pasa en una ceremonia o una celebración sin una preparación previa. Es lo que yo hago cada día y fue entonces cuando me decidí a entrar en este sector porque antes no me sentía identificado con las tendencias que había en las que predominaban los posados”, explica.
“Ningún sistema es mejor ni peor que otro, pero creo que es importante como fotógrafo sentirte identificado y cómodo con lo que haces porque así puedes dar todo de ti”, asegura.
Ahora, con la mejora de la situación sanitaria en el horizonte y la más que probable vuelta de bodas y eventos, ha realizado el lanzamiento de Akila Foto, la marca bajo la que realizará este tipo de trabajos con la intención de aumentar la cuota de mercado y realizar una apuesta mayor por estos sectores.
Un objetivo que mantiene como base su amplia experiencia y su estilo inconfundible que le valió conseguir el premio a la mejor fotografía individual en el concurso nacional Premios Ejército del Ministerio de Defensa en su edición de 2014.