El Área Sanitaria Serranía realizará pruebas médicas a los sanitarios que utilizaron durante más de una semana las mascarillas defectuosas que envió a Ronda el Ministerio de Sanidad, según ha informado hoy el Sindicato Médico de Málaga (SMM).
Hay que recordar que en una reunión que mantuvieron los miembros de la Dirección del Área Sanitaria Serranía con las seis centrales sindicales del Hospital, éstas reclamaron que se le realizasen pruebas a los sanitarios que han utilizado estas mascarillas defectuosas, para comprobar si han podido ser contagiados por coronavirus, al no contar con la protección adecuada.
«Aunque en un principio desde la Dirección del Área Sanitaria Serranía se quiso minimizar este asunto, le hemos demostrado con los envoltorios de las mascarillas y con testimonios que a Ronda llegó un lote defectuoso, y por ello finalmente han reconocido este hecho y se realizarán los test que hemos solicitado a estos trabajadores», señala Cristóbal Avilés, responsable del SMM.
Según las estimaciones del Sindicato Médico, aunque aún se está recabando información sobre el número de sanitarios, principalmente de Urgencias y de Cuidados Intensivos, que utilizaron estas deficientes mascarillas, hay 70 profesionales que han informado que trabajaron con ellas y «la cifra podría ascender a 200».
El lote de mascarillas defectuosas que envió el Gobierno de España a Ronda son las denominadas N95 de Garry Galaxy, que no cuentan con los niveles de protección exigidos para los profesionales sanitarios.
Los sindicatos de sanitarios estiman que han podido ser unas 1.500 mascarillas las fueron enviadas a Ronda por parte del Ministerio sin contar con la catalogación necesaria. En concreto, para garantizar un alto grado la protección, las mascarillas N-95 y FFP2 tienen garantizar un aislamiento de entre un 92 y un 95%. Sin embargo las que se repartieron entre los profesionales rondeños contaban con una protección de entre un 70 y menos de un 80%.