Las previsiones de la tarde noche del Viernes Santo apuntaban a fuertes rachas de viento y a lluvia y ello motivó, de forma lógica, que la Junta de Gobierno de la Real Hermandad del Santo Entierro de Cristo y Nuestra Señora de la Soledad acordase suspender la estación de penitencia.
Debido a que esta Hermandad es la oficial de Ronda, numerosas autoridades civiles y militares se concentraron en las puertas de la Casa de Hermandad, en la calle Empedrada, donde igualmente había cientos de vecinos del barrio de San Francisco y fieles llegados desde todas partes.
Pasadas las 19.00 horas el hermano mayor salía a la calle para anunciar que se había decidido suspender la procesión y que los titulares podrían ser visitados en el interior de la Casa de Hermandad.
Allí sonaron marchas solemnes interpretadas por la Banda Juvenil Cruz Roja de Sevilla y la Banda de Música Las Golondrinas de Vélez Málaga, mientras los horquilleros mecían los dos pesados tronos.
Este año la cofradía presentaba numerosas novedades, como 15 varas de representación y 6 palermos; el lateral derecho del catafalco del Cristo Yacente, una túnica de terciopelo bordada en oro para San Juan Evangelista y un pañuelo de salida para Nuestra Señora de la Soledad, entre otras.
Otro año será.