Las ratas son las primeras en abandonar el barco

Las ratas son las primeras en abandonar el barco.

Esa frase viene como anillo al dedo en relación a lo que está ocurriendo en el bipolar PSOE de Ronda, que durante las últimas semanas está viviendo una ajetreada convulsión en la que los que antes eran acérrimos partidarios de la hasta ahora alcaldesa, Teresa Valdenebro, ya empiezan a buscar arrimo en la nueva ejecutiva encabezada por Isabel Aguilera, por aquello de que “hay que comer todos los meses”.

Mientras, en la ejecutiva provincial del PSOE tienen los ojos puestos de forma continua y directa en el Juzgado de Ronda, para ver qué depara el conocido ‘caso boda’. Tras unas semanas de acelerada actividad por este asunto, el tema ha entrado en un compás de espera y no se descarta que sea declarado como “procedimiento complejo”.  Y es que no es lo mismo tenerle que decir a una regidora que se vaya, a que se vea obligada a irse. Se evitan titulares no deseados. En ese marrón se encuentra el PSOE de Málaga.

Para los que no entiendan el argot judicial, como me pasa a mí, eso de caso complejo quiere decir que la instrucción de este asunto ya no tiene que durar de forma obligatoria seis meses, y que podría ampliarse, si hiciese falta, otros seis meses más. Ello le daría oxígeno a Valdenebro, ya que en el caso de que se abra juicio oral contra ella tendría que dimitir de forma fulminante, según se recoge en los estatutos internos del PSOE. También le daría un respiro temporal al Tripartito, que en caso se ser enjuiciada la alcaldesa tendría un serio problema a la hora de mantener el pacto, sobre todo para los ediles de IU, que tan “pulcros” son para los casos de presunta corrupción, cuando les interesa. Otras veces no. A los tres del extinto PA les da igual, con tal de seguir cobrando.

Pero en previsión de todo lo que pueda ocurrir, ya algunos del PSOE, no tan fieles al régimen actual de ordeno y mando de Valdenebro, buscan acercarse a Aguilera y a los suyos, de forma descarada, humillante y sin ningún tipo de complejo ni remordimiento.

Personajes tan “fieles”, como supongamos: P.M.; M.J.S.; y A.O., e incluso algunos más, ya estarían pensando en aquello de que «abandonar el barco antes de que se hunda, como las ratas”; es más rentable para su futuro político y personal.

Lo que pasa es que los buques de rescate que se encuentran alrededor no están por la labor de lanzarles los salvavidas.