Con una gran entrada en la Plaza de la Real Maestranza de Caballería de Ronda se celebró la 58 edición de la tradicional Corrida Goyesca, que contó con un excepcional cartel, compuesto por Morante dela Puebla, Julián López “El Juli” y Miguel Ángel Perera, diestros que ya habían saboreado las mieles del triunfo en el coso rondeño.
Los Toros de Zalduendo estuvieron bien de presentación pero escasos de fuerzas y fueron los matadores los que tuvieron que hacer todo el trabajo para engrandecer una tarde en la que dos los tres matadores, El Juli y Morante, salieron por la Puerta Grande.
El primero de Morante no tenía nada aprovechable y el de la Puebla estuvo cumplidor, intentando agradar a los aficionados, pero poco pudo sacar de su enemigo.
En cuanto a El Juli, su primero era un toro de poca clase, pero el madrileño consiguió algunas tandas de mérito, arriesgando siempre y demostrando su magisterio. En todo momento estuvo por encima del de Zalduendo y cortó una oreja ganada a pulso.
A Miguel Ángel Perera tampoco le sonrió la suerte con el tercero de la tarde, aunque se esforzó lo imposible, estando muy por encima de las cualidades de un toro deficiente y dibujando algunos de los momentos más brillantes de la tarde.
Morante la lió en el cuarto, probablemente el mejor toro de los que se lidiaron. Realizó unas verónicas enormes, mató de una gran estocada y su faena fue premiada con dos orejas por la presidencia.
El Juli no quería perder la oportunidad de salir por la puerta de Pedro Romero y lo consiguió cortando una merecida oreja al quinto de la tarde. Algunos de los naturales que ejecutó el diestro madrileño fueran para cartel, y al igual que Morante, se ganó por derecho salir a hombros de la Maestranza.
Perera no quería quedarse atrás y realizó una sensacional faena al que cerraba plaza. El de Puebla del Prior volvió a mostrar el gran momento de forma que atraviesa y consiguió levantar al público cuando se llevó la muleta a su mano izquierda. Volvió a estar por encima de toro con poca casta y tras despacharlo de pinchazo y descabello, la presidencia no concedió una oreja que el respetable pidió con fuerza.
En resumidas cuentas, una Goyesca en la que hay que agradecer el tremendo esfuerzo realizado por los tres matadores, que estuvieron muy por encima de la poca casta que mostraron los toros de Zalduendo, que no respondieron a los resultados que esta ganadería ha dado en nuestra ciudad.
Ruiz Miguel
Una vergüenza lo de Morante. Pero la culpa no es suya. Un impresentable del toreo. Es del Presidente de la corrida que le regaló los dos trofeos. Y la de hoy otra vergüenza más volviendo a regalar la salida a hombros a un rejoneador venido a menos (Diego Ventura) que hoy no ha sido capaz de matar de manera decente a ninguno de los dos toros en suerte. El futuro de esta feria taurina corre peligro. La del papel couché ya se perdió.
Ruiz Miguel
Por segundo año consecutivo Morante. Sí sí. Esta mezcla de torero y bufón. Se ha reído de los rondeños. Se ha negado a recoger el premio a la mejor faena de la feria. No sé si habrá sido por su turbulenta personalidad o por considerar el premio inmerecido como se pudo comprobar.