El exalcalde de Ronda, Antonio Marín Lara, ha declarado este miércoles en el Palacio de Justicia de la localidad malagueña por una de las piezas separadas de la investigación del caso Acinipo, y que hace referencia al pintado de varios bloques de viviendas en la barriada de El Fuerte entre 2010 y 2011. Según la investigación, estos trabajos, por valor de unos 50.000 euros, fueron divididos en varias facturas, por lo que no se convocó concurso público para su ejecución.
A su entrada en los juzgados, el exregidor se mostró “tranquilo” y calificó la causa de “chorrada”. Ya tras su declaración, aseguró que todo había sido hecho “perfectamente” y conforme a la legalidad. Además, señaló que volvería a actuar del mismo modo, ya que estas viviendas “son públicas” y pertenecían a una zona “de actuación preferente”.
En cuanto a las líneas de su defensa, ha relatado que los documentos que hacen referencia a esta actuación fueron “manipulados”, ya que en ellos aparece su firma falsificada, según ha sostenido. Además, ha declarado que algunos de los informes tenían una fecha posterior a la de su firma, con una diferencia de varios meses.
Durante la mañana declararon, además de Marín Lara, la interventora del Ayuntamiento de Ronda, el entonces primer teniente de alcalde, Francisco Cañestro, y el propietario de la empresa que realizó el pintado. Los dos primeros evitaron a los medios de comunicación a su salida del juzgado, mientras que el empresario indicó: “Yo solo me dedico a pintar y a declarar mis facturas”.