El pasado jueves el salón de Plenos de la Diputación Provincial era escenario del relevo en la presidencia del organismo supramunicipal que desde ese día ha pasado a ser responsabilidad del popular, Elías Bendodo que sustituye en el cargo al socialista, Salvador Pendón, que ha estado ocho años al frente de la Diputación malagueña.
Precisamente para este y su equipo serían las primeras palabras del nuevo presidente, “nuestras diferencias políticas no han impedido una relación cordial y responsable para gobernar en un escenario muy difícil marcado por una crisis sin precedentes”.
Igualmente Bendodo tuvo recuerdos para todos los presidentes que le han precedido, agradeciendo a todos ellos su dedicación para conseguir acercar la institución a todos los malagueños/as, especialmente en los municipios más pequeños.
En su discurso el nuevo presidente marcó como uno de sus primeros objetivos que “la Diputación sea a partir de ahora la casa de todos los ayuntamientos y las personas, todas las personas, desde aquí tomaremos las decisiones que harán de Málaga la tierra de las oportunidades”.
El presidente fue glosando la diversidad de la provincia a través de distintas personas que ha tenido oportunidad de conocer a lo largo de su vida política y la larga campaña electoral, desde estudiantes hasta jubilados, pasando por empresarias, amas de casa, repasando con sus casos la realidad en todas las comarcas de nuestra provincia.
Sobre los planes de futuro Bendodo abogó por la concertación como eje fundamental de su política de gobierno, mientras que en infraestructuras se planificará teniendo en cuenta los criterios de impacto real y marcando el desarrollo rural como un objetivo primordial.
