No he querido dejar pasar mucho tiempo para hacer públicas mis explicaciones y conclusiones sobre las elecciones municipales.
La primera y más contundente es el retroceso de la candidatura Verde encabezada por mi. Los resultados no dejan lugar a la especulación: hemos perdido. Y al utilizar la primera persona del plural no pretendo eludir la responsabilidad de la derrota. Como cabeza de lista me toca asumirla completa.
Propia fue la elección de la estrategia utilizada en la campaña electoral; resulta lógico que ésta debía adaptarse a la personalidad y maneras del cabeza de lista. Otra cosa hubiese sido ofrecer un producto falso y engañoso.
Se renunció al papel como medio de comunicación, que aún ahora me parece una decisión acertada y coherente con las formas de vida que proponemos.
Se renunció también a regalar objetos a los votantes por considerar que nuestra dedicación, análisis y estudio de la realidad rondeña, debían bastar para presentarnos a unas elecciones sin necesidad de convertir la campaña en una cabalgata de reyes magos.
Centramos la campaña en INTERNET, donde en forma de video desgranamos nuestras propuestas. El día 22, nuestro canal en YOUTUBE reseñaba la cifra de 1.767 videos reproducidos. Cifra más que aceptable, así que el mensaje se divulgó, aunque otra cosa es que no gustara o convenciera. La producción del canal, si bien humilde, transluce un trabajo que se aprecia en el material exhibido.
Hemos padecido la manipulación efectuada por el PSOE y quien lo encabeza, de los medios de comunicación. Nuestros candidatos no han tenido acceso al periódico, ni a la radio, ni televisión municipales, tampoco al canal privado por cable. Solo La Voz de Ronda y Radio Coca se han hecho eco de nuestra existencia.
Otra línea estratégica fue incidir en la presencia en la calle con nuestra sede móvil. Con nuestra presencia en la calle hemos intentado hablar con los ciudadanos y hacerles llegar nuestro mensaje de forma personalizada. Cumplimos lo programado a excepción del día de luto por la tragedia de Lorca.
Se renunció a los mítines. Anacrónico acto convertido en una reunión de convencidos, un espectáculo más televisivo que político.
Se decidió reducir al mínimo el gasto de campaña por ser uno de los pilares de nuestra propuesta económica para la sociedad. Todo lo exhibido fue elaborado de forma manual por lo que no se han superado los 600 euros de gasto. La congruencia de un partido se mide por su capacidad de adaptarse a las condiciones de la ciudadanía, y la crisis que estamos soportando debía verse reflejada en la campaña de un partido que aspira a representarlos.
Se ha tenido presencia en todos los debates realizados. Asistimos al novedoso “Tengo una pregunta para usted”, organizado por el Observatorio, cualquiera puede juzgar el papel jugado. A mi entender hemos representado con dignidad, conocimiento y decisión nuestra propuesta política.
Respecto al contenido político, nuestro programa es el mismo que en la campaña anterior, aunque mejorado y ampliado.
Hemos puesto hincapié en las soluciones a la crisis que padecemos. El foco puesto sobre la Maestranza y su ilegitimo uso de la plaza de toros, no tardará mucho en recordarse, a poco que los nuevos gobernantes suban los impuestos para pagar las deudas, dado los millones que recauda.
Nuestra apuesta por la Universidad Comarcal es la idea más trabajada y madura de cuantas se han presentado. Otra cosa es que para conseguirla haya que enfrentarse a los tradicionales tabúes del pueblo como son UNICAJA, Maestranza y Moctezuma.
Nuestra presencia en los comicios ha logrado que el ecologismo político siga vivo en nuestra Ciudad. El movimiento verde español pronto confluirá en EQUO y Ronda no debe quedarse fuera de ese movimiento.
Hemos conseguido cambiar una dinámica exclusivamente reivindicativa por una dinámica propositiva. Los Verdes ya no sólo denuncian, ahora proponen soluciones a todo tipo de problemas.
Antes de terminar me gustaría destocarme públicamente frente al grupo de personas que han hecho posible esta campaña. En los individualistas tiempos que corren es muy difícil conformar un grupo con un objetivo y de forma desinteresada. Un grupo sin jerarquía, sin líder, sin generales ni soldados, pero que ha sabido llevar a termino un gran trabajo. Un grupo donde se respira más libertad que en los partidos tradicionales.
Y por supuesto y más importante, los 191 ciudadanos que decidieron confiar en nosotros sin dejarse llevar por los vaivenes pendulares entre el PSOE y PP, síndrome que sufren los votantes de forma compulsiva y cíclica. Hemos retrocedido, pero estos votantes son reales, están ahí y esperan de nosotros algo más que vulgares lametones de las heridas; les debemos un respeto para los próximos cuatro años y éste debe plasmarse en una continuidad en el trabajo.
Nota al margen: Nuestro trabajo también ha contribuido para que en el Ayuntamiento de Ronda haya acabado la era de los orcos y haya comenzado la era de los hombres, como diría Tolkien.