El alcalde de Ronda, Antonio Marín Lara, ha culpado a los vecinos de Arenal 2000 de ser los responsables de parte de los problemas que está padeciendo esta urbanización, vendida como de lujo, y que en la actualidad permanece en parte a oscuras y sin alumbrado público, además de tener deficiencias en otros equipamientos públicos.
El primer edil respondió a las quejas vecinales durante la celebración del pleno ordinario convocado para este viernes. “Creo que son ellos los que mienten”, dijo Marín en referencia a las manifestaciones realizadas por algunos de los vecinos en las que aseguran sentirse engañados por el alcalde. En este sentido, aseguró no haber realizado promesas y únicamente haber dado algún consejo sobre la configuración de las futuras zonas verdes de la urbanización para que tuviesen un menor coste de mantenimiento.
En cuanto a los problemas que están sufriendo, aseguró que las presiones realizadas por los vecinos para poder entrar en sus casas antes de estar la urbanización recepcionada en su totalidad, es uno de los motivos que han llevado a la situación que se padece en estos momentos. “Ellos son los que provocaron meterse allí”, afirmó el primer edil, que advirtió a los vecinos que tendrán que ser ellos los que se hagan cargo del mantenimiento de los jardines y calles como hacen los residentes de las urbanizaciones cercanas. En este sentido, el edil del PP y ex delegado municipal de Obras, José Herrera, corrigió al alcalde y explicó que esas zonas no son comparables porque las calles y las zonas verdes de Arenal 2000 sí que está contemplado que sean de titularidad municipal y que deberá ser el Ayuntamiento el encargado de mantenerlas. No obstante, Marín Lara, insistió en señalar que hay zonas que son “privadas” y de las que se tendrá que hacer cargo la comunidad.
En cuanto a la aparición en diversos medios de comunicación de las quejas, el regidor señalo que “si creen que presionando o saliendo en medios van a conseguir algo de esta Alcaldía, que se olviden, van a conseguir lo que marca la ley”. Además, también matizó que el Consistorio exigirá lo mínimo establecido en la ley a la promotora y procederá a la recepción de la urbanización, para que desde ese momento tenga que ser la comunidad la que se haga cargo del mantenimiento. De igual modo, rechazó que el Ayuntamiento se haga cargo de este “mochuelo” que considera que no ha creado ni provocado. “Que no vengan ahora a que papá Ayuntamiento les ponga los árboles”, dijo Marín, que considera que eran los vecinos los que tenían que haber comprobado lo que estaban comprando en su momento. “Los vecinos cuando compran tienen que saber qué están comprado”, afirmó rotundo el regidor rondeño.
Continuando con sus advertencias a los residentes, también les animó a conocer mucho mejor también las obligaciones que tienen como vecinos y no únicamente los derechos. “Hay vecinos que creen que no tienen obligaciones”.
Mientras tanto, el primer teniente de alcalde, Francisco Cañestro, explicó que el Ayuntamiento había iniciado el procedimiento para ejecutar los avales que había depositado la promotora, al tiempo que dijo “entender” el malestar existente y se presentó como un vecino más de la urbanización. “Yo tengo una casa que se cala por el tejado, les entiendo perfectamente”.
Por su parte, la delegada municipal de urbanismo, explicó que había mantenido una reunión con los técnicos de la empresa para indicarles los aspectos que seguían sin cumplir y que habían decidido continuar con el proceso de ejecución de avales.
