El alcalde de Ronda, Antonio Marín Lara, respaldó ayer a su delegado de Seguridad, Rafael Lara, y a los responsables de la Policía Local, por su actuación para retirar las pancartas colocadas en el Palacio del Rey Moro y detener a su propietario por no desistir de su actitud. Además, acusó al empresario alemán de ser el “único” responsable de lo está ocurriendo, mientras anunciaba que están barajando la posibilidad de expropiarle el inmueble, catalogado como Bien de Interés Cultural, ante el peligro de derrumbe del mismo. “Si hubiese hecho las cosas bien no le habría pasado nada”, aseguró Marín.
Además, le acusó de haber presentado un proyecto “que parece un ovni”, lo que habría provocado la negativa de Cultura a aprobarlo, retrasando la tramitación del mismo. “Tiene las mismas fantasías que el proyecto que presentó, dijo el regidor en referencia al empresario germano, al que acusó de vivir en un mundo “irreal”.
Por su parte, tras su detención, la defensa de Jhoen Knie, ha confirmado que ya ha presentado una denuncia en la Comisaría de la Policía Nacional por lo sucedido, al considerar que se podrían haber cometido varios delitos, como detención ilegal, daños o coacciones.