El aparcamiento de Blas Infante deberá desaparecer antes del 31 de julio tal y como ha exigido la Junta de Andalucía al Ayuntamiento de Ronda. El motivo es que está situado junto a la plaza de toros de la Real Maestranza, algo incompatible con la nueva Ley de Patrimonio Histórico que impide este tipo de espacios a tan corta distancia de una monumento histórico tan importante como el coso rondeño. De esta forma el aparcamiento se convertirá en una gran explanada que dará paso a los jardines de Blas Infante, desapareciendo de allí el estacionamiento salvo para la carga y descarga que necesitan los establecimientos de hostelería situados en la zona.
En concreto se perderán una setenta plazas de aparcamiento en pleno centro de Ronda pero, según el concejal de Tráfico, José Morales, los usuarios podrán dejar sus coches en alguno de los otros tres aparcamientos de titularidad privada que existen en los alrededores, el de la plaza del Socorro, el de la plaza de la Merced y el de la Avenida Poeta Rilke. También se va a cambiar la ubicación de la actual zona de parada de los tradicionales coches de caballos que se trasladarán al fondo de la nueva explanada que se quedará tras eliminar el aparcamiento, algo que se tendrá que hacer al terminar este mes. El nuevo espacio se piensa remodelar con nuevos elementos decorativos para hacerlo más atractivo al visitante.