La Policía Local procedió el pasado lunes a la detención de tres menores con edades comprendidas entre los 12 y los 14 años al ser sorprendidos mientras arrojaban piedras a los coches que entraban a Ronda por la rotonda de la circunvalación sur, en la nueva barriada del Arenal.
El concejal delegado de Seguridad del Ayuntamiento de Ronda, Rafael Lara, calificó el acto de “gamberrada de unos niños ya que, con esa edad, no se les puede calificar ni de delincuentes a pesar de que un acto de estas características podría haber tenido graves consecuencias si es el detonante de algún tipo de accidente de circulación”. En este sentido afirmó que “es bueno recordar que la responsabilidad civil en estos casos es de los padres de los menores implicados que tendrían, en último lugar, que hacerse cargo de las consecuencias legales o económicas que pudiera generar esta actitud de sus hijos y sus consecuencias”.