Enorme tensión la que se vive en estos días entre los vecinos de la popular barriada rondeña de La Dehesa ante la aparición en las últimas semanas de varios animales muertos, indicando todos los indicios que han sido fruto de un envenenamiento. Los primeros sucesos se produjeron en pasado verano con la muerto de un par de perros pero, al ser casos aislados, no se dio más importancia al hecho. La alarma ha saltado cuando, en apenas tres semanas, han muerto hasta tres perros, un gato y numerosos pájaros. Según el relato del último afectado, Juan Villalonga, “saqué ayer mismo a pasear a mi perro y, como los rumores ya estaban corriendo, no quise que paseara mucho por la calle por lo que apenas ando unos metros y al subir a casa, en poco más de cinco minutos estaba muerto”. El dueño bajó enseguida a repetir el recorrido de su mascota y comprobó como en la calle había “un extraño polvo de color anaranjado”.
En otros casos se habla de la colocación de embutidos que estarían también salpicados de este veneno. Lo realmente preocupante del caso es que todo esto está ocurriendo prácticamente a las puertas de uno de los colegios existentes en la zona por lo que la preocupación es mayor al considerar que pueda existir un peligro para los niños que puedan entrar en contacto con este veneno. Las autoridades ya han tomado medidas al desconocerse quien o quienes pueden ser los responsables de la colocación de esta sustancia letal y tanto la Policía Local como la Patrulla Verde han vigilado la zona durante el pasado fin de semana, aunque sin resultados.
Algunos de estos animales han corrido mejor suerte y, al menos tres perros han conseguido sobrevivir tras entrar en contacto con el veneno y pasar por el veterinario. Precisamente una muestra de uno de ellos se ha remitido ya a un instituto especializado para poder determinar si se trata de un envenenamiento, algo que prácticamente se confirma por las autoridades y definir qué tipo de sustancia se está utilizando. Los resultados de estos análisis tardarán al menos diez días en llegar, por lo que habrá que esperar para saber con certeza que está ocurriendo en esta popular barriada.
Mientras tantos los dueños de mascotas tienen miedo a sacar a pasear a sus animales llegando incluso a salir a la calle con ellos en brazos para evitar que puedan ingerir ese ‘polvo anaranjado’ que tiene atemorizado a todo el barrio.