Solo queda un año para hacer el trabajo pendiente, tanto del Gobierno local como de la oposición. El resto de meses del año 2015, son tiempo perdido en vender los logros o los errores, según el bando.
En este año los gestores del Ayuntamiento tendrán que aplicarse para conseguir hacer realidad los proyectos en los que se ha venido trabajando en este tiempo, aunque algunos de ellos, vendidos al inicio con gran fuerza, como el centro de recepción de visitantes, parecen definitivamente abandonados.
Mientras tanto, otros deben aclararse, como la reconversión del abandonado matadero comarcal o la construcción de una residencia de ancianos en la Molinilla, todo ello sin hablar de los que tienen una responsabilidad directa del Consistorio, como la nueva estación de autobuses y la biblioteca comarcal, la escuela de hostelería en el viejo edificio del mueble…, en definitiva, una larga lista que debe despejarse en los primeros meses del año, porque ya sabemos lo que ocurre cuando llega el verano y todo el mundo comienza a hablar de la Goyesca.
Por su parte, la oposición tiene tiempo para remontar en el último año.