Han recaudado 22.000 euros para que el pequeño, con parálisis braquial, pueda ser operado
La solidaridad de los vecinos de Cuevas del Becerro darán la oportunidad a Unai Pro, un recién nacido con parálisis braquial, de poder recuperar la casi totalidad del movimiento de sus brazos. Este problema de salud, que popularmente se conoce como el síndrome de los brazos de trapo, hace que las personas que lo padecen tengan falta de movilidad en ambas extremidades superiores por un problema en el flexo braquial, que generalmente se produce al nacer, concretamente al salir la cabeza del bebé y quedar los brazos encajados en la cavidad pélvica.
Juan Diego Pro, padre del pequeño, se mostraba abrumado por la ayuda que sus vecinos le han prestado sin ni siquiera pedirla. “Yo no había dicho nada, era un tema que teníamos en casa y ya habíamos mirado pedir un préstamo de 20.000 euros para pagar la operación”, explica al ser preguntado por cómo han surgido las ayudas.
La respuesta de sus vecinos le sorprendió enormemente y todavía no sabe cómo agradecer la ayuda. “Ya no necesitamos más ayudas, no lo hacemos público para eso, lo único que queremos es agradecer al pueblo el apoyo que nos han dado sin pedir nada”, dice un emocionado Juan Diego.
Los vecinos del pueblo organizaron al conocer el problema del pequeño diferentes actividades que han permitido recaudar 22.000 de los 25.000 euros necesarios para sufragar la operación urgente que se realizará en una clínica especializada de Barcelona. Será la primera de las dos intervenciones a las que tendrá que ser sometido para que pueda recuperar la casi totalidad de la movilidad de sus brazos, algo que será factible si se hace antes de que cumpla los 6 meses de edad, según les han explicado los médicos especializados a los que han acudido.
De forma paralela, los padres han puesto su caso en manos de un abogado especializado en posibles malas prácticas médicas, al considerar que una vez que el pequeño fue derivado al hospital comarcal de Ronda no habría recibido la atención adecuada por parte de los servicios de rehabilitación del mismo. En este sentido, explican que ese momento del tratamiento habría sido muy importante, al producirse en algunos casos recuperaciones espontáneas durante un proceso continuado de ejercicios previos a la posible intervención.
Dejando a un lado la posible vía judicial, los padres sí que han solicitado la derivación de la atención de su hijo al Hospital Materno de Málaga, al haber “perdido la confianza” en el responsable de la unidad encargada de prestar la atención al pequeño, al considerar que no se trataba de la forma adecuada.