La Asociación Montaña y Desarrollo, con sede en Benalauría, es un colectivo sin ánimo de lucro que nació entre 2002 y 2003 con el afán de impulsar un modelo de mundo rural sostenible desde diferentes perspectivas (social, económica, educativa, laboral,…) que resultase atractivo a las personas para desarrollar su proyecto de vida, objetivo por el que continúa trabajando a través de múltiples proyectos e iniciativas una vez alcanzada la mayoría de edad.
La asociación, que desempeña su labor principalmente en el Valle del Genal y la Serranía de Ronda, fue creada por 8 socios fundadores y actualmente está compuesta por 22 personas que realizan su labor en áreas específicas atendiendo a su perfil.
Montaña y Desarrollo es un Centro de Desarrollo Rural (CDR) integrado en COCEDER que, a su vez, es una Organización No Gubernamental (ONG) formada por un conjunto de CDR, con reconocimiento legal y sin fines de lucro, que gozan de plena independencia en su actuación y están ubicados en el medio rural con un proyecto definido de desarrollo integral.
Ana Belén Ruiz, gerente de la entidad, ha explicado que Universidad Rural Paulo Freire –Serranía de Ronda – CDR Montaña y Desarrollo sustenta su actividad en 4 áreas transversales e interconectadas entre sí: acción social, género y feminismo, fomento de la cultura emprendedora y sostenibilidad agroecológica. En primer lugar, mediante el eje de acción social la asociación pone en marcha mecanismos para contribuir a satisfacer las necesidades básicas que pueden presentar los habitantes de la comarca.
En este sentido, ante la situación de emergencia sanitaria provocada por el Covid-19 el colectivo ha readaptado sus servicios y redoblado sus esfuerzos prestando apoyo y atención a personas mayores, realizando repartos de productos de primera necesidad y medicamentos a los ancianos para evitar que salieran de sus domicilios, proporcionando material informático y de acceso a internet a niños y jóvenes para que pudieran seguir desde casa el curso lectivo, poniendo en marcha campañas de información, repartiendo material sanitario de prevención frente al coronavirus, colaborando en tareas de desinfección y limpieza o participando en ‘Oído-Serranía’, una iniciativa solidaria puesta en marcha por la Escuela de Cocina El Golimbreo de Ronda para repartir gratuitamente menús elaborados a las familias de la comarca que han atravesado una situación especialmente complicada durante el periodo de confinamiento.
Por otro lado, la asociación introduce la perspectiva de género y feminismo en todos los proyectos y su feminario se ha convertido en un espacio de encuentro y debate desde el que trabajan para lograr la visibilización de las mujeres y su papel en la historia del mundo rural, asesorando también a los diferentes grupos en el desarrollo de sus actividades, facilitando indicadores y herramientas básicas para aplicar la perspectiva de género y desarrollando proyectos propios de sensibilización, formación e investigación. Destaca la organización de los foros feministas en diferentes municipios, iniciativa que ya ha cumplido 10 ediciones y que sirve de colofón al trabajo de un año en torno a una temática concreta (economía, soberanía alimentaria, salud, movimientos sociales,…).
Ana Belén Ruiz ha indicado que para la Asociación Montaña y Desarrollo es fundamental el fomento de la cultura emprendedora a todos los niveles, mediante el que se persigue el fortalecimiento del tejido empresarial de la comarca con la prestación de servicios de asesoramiento, formación y difusión, además de poniendo en valor recursos concretos. En este punto la gerente resaltó el Programa Operativo de Inclusión Social y Economía Social (POISES), cuya finalidad es luchar contra la despoblación fomentando la participación de personas que vivan o quieran ir a vivir al medio rural. Es necesario señalar también el proyecto ‘NIDUS, volar para volver’, una escuela de innovación e iniciativas rurales sostenibles dirigida especialmente a jóvenes que busca impulsar la creación de una red de emprendimiento social en la comarca.
En cuanto a la sostenibilidad agroecológica, la asociación estimula la puesta en marcha de propuestas y acciones relacionadas con la soberanía alimentaria con un máximo respeto por el medioambiente. Aquí destaca el proyecto ‘RED-Vitalización Social de las Huertas del Valle del Genal y del Guadiaro’, que nace al constatar, tras un estudio previo de la realidad cercana, la necesidad de establecer una serie de estrategias colectivas que sirvan, por una parte para volver a poner en valor la agricultura de huertas en la comarca y por otra para que, sobre esto, se articule un proceso de desarrollo agrícola en una zona castigada por la emigración y la falta de iniciativas de emprendimiento, y donde la gran mayoría de la población se encuentra en riesgo de exclusión, particularmente la juventud y especialmente las mujeres que no encuentran recursos laborales para permanecer en su territorio de origen.
Quizá el máximo exponente de esta línea de acción sea la Fiesta de los Huertos, que cada año se celebra en Las Vegas, pedanía de Benalauría, con el objetivo de comercializar productos excedentarios de las huertas locales, seguir poniendo en valor todo el conocimiento campesino en torno a la agricultura, sensibilizar a todas las generaciones sobre los beneficios de una alimentación local, animar a la población local joven que tiene huertos infrautilizados a que gestione sus propias semillas y produzca sus hortalizas, tanto para autoconsumo como para venta directa y, por último, fortalecer el vínculo entre las personas productoras y las consumidoras más allá de los espacios de mercado.
Respecto a la problemática de la despoblación, Ruiz ha señalado que es imprescindible poner en marcha políticas, medidas y propuestas efectivas que ayuden a crear posibilidades laborales en el medio rural, llevar a cabo la adaptación definitiva a las nuevas tecnologías para favorecer el teletrabajo y luchar por la dignidad y la rentabilidad del trabajo en el campo, en la tierra. En esta línea, hace años el colectivo creó la plataforma www.volveralpueblo.org mediante la que se dan a conocer diferentes aspectos de la comarca y se fomenta el asentamiento de nuevos pobladores con la puesta a disposición de los mismos de un banco de datos de viviendas, tierras y negocios de la zona.
Por último, Ana Belén Ruiz ha añadido que Montaña y Desarrollo se marca múltiples retos de futuro, como son la lucha por un medio rural dinámico y vivo, seguir siendo un referente del movimiento feminista rural, incidir en la problemática de las desigualdades sociales teniendo en cuenta que la acción social nunca debe convertirse en asistencialismo o continuar trabajando con las nuevas generaciones de cara a crear una red de emprendimiento, siempre recordando los saberes de las personas mayores de la comarca.