La novena edición del Homenaje a la Legión reunión a más de 2.000 participantes este sábado, en un día que estuvo marcado por el sol y las dificultades de un recorrido que sufría la consecuencias de las abundantes precipitaciones caídas durante los últimos meses de forma continuada. Mucha agua, con acumulaciones de importancia en algunos puntos, y la presencia de barro en la gran mayoría de los tramos. Todo ello hizo que la prueba tuviese un punto añadido de dureza en un trazado que de por sí ya presentaban un considerable desnivel.
Ante este circunstancia marchadores y ciclistas se afanan casi más en tratar de mantener el equilibrio y no caer en alguna de las trampas que preparó la naturaleza, aunque más de un ciclista terminó casi con el agua al cuello por no calcular bien la profundidad de los charcos que se acumulaban en los carriles. Eso sí, la prueba transcurrió sin grandes incidentes y Protección Civil únicamente tuvo que realizar atenciones por torceduras o caídas sin graves consecuencias, aunque tuvo que realizarse algún traslado hasta el hospital comarcal.
De este modo, la conocida como hermana pequeña de los 101 no defraudó, convirtiéndose en un magnífico entrenamiento de cara la mítica prueba legionaria que tendrá lugar próximamente.
