Los lazos existentes entre los Coros y Danzas de Ronda con la tierra mejicana es muy especial y se han hecho cada vez más estrechos con el paso de los años. Todo empezó con el viaje que recordamos en esta semana y que, por su interés y su significado, además de por su duración, nos ocupará también la próxima edición.
El primer viaje de los rondeños a Méjico estuvo rodeado desde el primer momento por todo el calor del pueblo mejicano que, como todo lo que llega desde la ‘madre patria’ como ellos conocen a España, es tratado con especial cariño.
La presencia en Méjico se prolongó durante varias semanas a lo largo de los meses de julio y de agosto del año 1978 y fue fruto de la invitación de FONAPAR y el Club de Los Leones, una de las instituciones más importantes de la sociedad mejicana. En cuanto a la primera era una institución genuinamente mejicana que basaba su trabajo en la promoción cultural del pueblo que contaba con el apoyo de la primera dama de la Nación en aquellos años, doña Carmen Romano de López Portillo, impulsora, según la prensa de la época, “incansable de sus actividades”.
Fueron varias las actuaciones que durante su viaje realizaron los artistas rondeños en Méjico pero de todas ellas caben destacar las que les llevó a participar en el primer Festival Hispanoamericano de Folklore, que tuvo lugar en el estado de Saltillo y la XXI Feria Estatal de Coahuila, en el mismo estado. Otros momentos que cabe recordar fueron la intervención en el espectáculo del Lago del Viejo Bosque de Chapultepec, en Méjico D.F., del que a día de hoy los participantes aún guardan un hermoso recuerdo, una misa flamenca que se celebró en Ciudad Satélite de la misma capital, además de un festival de folklore español que tuvo a los rondeños como únicos participantes. De éste último hablaremos de forma amplia la próxima semana.
Acompañados por grupos representantes de Argentina y del propio país anfitrión, los rondeños realizaron un inolvidable viaje que conoceremos con más detalle en lo que fue el plato fuerte de la primera presencia de los Coros y Danzas en Méjico, el primer Festival de Folklore Hispanoamericano.