El índice de delincuencia de Ronda se sitúa en 40 infracciones por cada 1.000 habitantes, una cifra que está unos 30 puntos por debajo de la media nacional, lo que lleva al Inspector Jefe de la Comisaría de la Policía Nacional, Francisco Núñez, a afirmar con rotundidad que “seguimos siendo una ciudad segura”.
No obstante, los datos del pasado año reflejan un crecimiento de un 5% de las infracciones cometidas con respecto al año 2011, siendo los hurtos al descuido el principal problema delincuencial al que los efectivos policiales están teniendo que hacer frente. Móviles y carteras en bolsos abiertos son los principales objetivos de estos amantes de lo ajeno, que no dudan un segundo en fijar su objetivo entre aquellos ciudadanos que menos atención prestan a sus teléfonos o que descuidan sus bolsos o mochilas.
Según los datos registrados por la Comisaría rondeña el pasado año disminuyó el número de delitos, siendo las infracciones tipificadas como faltas las que han experimentado un crecimiento durante el último año.
En concreto, se redujo de forma notable el número de entradas en viviendas o casas de campo, aunque se experimentó un repunte de la sustracción de vehículos, con el robo de varios de ellos que terminaron siendo arrojados por un barranco del Puente de la Ventilla.
Precisamente, los robos en vehículos son uno de los aspectos que preocupan entre los responsables policiales, al haberse vuelto a producir sustracciones de radio-casete, una práctica que estaba ya casi olvidada, o la sustracción de objetos que se dejan en zonas visibles desde el exterior. En este apartado destaca que el 78% de los robos con violencia e intimidación que se han cometido han quedado resueltos.
En cuanto a las cifras de detenidos, fueron un total de 461 personas las que pasaron por sus dependencias, a las que se suman las 26 detenciones realizadas por la Policía Local. Estos datos reflejan un incremento del 5% con respecto a este mismo aspecto en el año 2011.
Por otra parte, Núñez, quiso destacar la importancia de algunas de las operaciones realizadas contra el tráfico de drogas, la pornografía infantil o la más reciente contra la venta de obras de arte falsas, como ha sido la incautación de 8 cuadros que supuestamente habían sido pintados por Picasso o Rubens.
