No corren buenos tiempos para los ayuntamientos, sobre todo para los de pequeñas poblaciones. Se las ven y desean para pagar las nóminas, y los servicios que benefician a la vecindad o se frenan o se eliminan, mal que les pese. Los desembolsos procedentes de las administraciones superiores se les regatean y no corresponden con las necesidades acuciantes de las que se aquejan o no llegan de ninguna manera. Los impagos de la Junta de Andalucía en materia de empleo no acaban de arribar, y Ronda y Antequera reclaman los 2, 5 millones que, en estas partidas, se les adeudan, con lo que los servicios que se prestan a la ciudadanos como los que se destinan a organismos de promoción del empleo y personal y alumnos de escuelas y talleres, se resentirán sin remedio.
El Partido Popular con la alcaldesa de Ronda a la cabeza, María de la Paz Fernández, trata de tranquilizar a los trabajadores afirmando que “no les dejaremos tirados”. Con esa esperanza afrontan al perjuicio que en estos colectivos de la ciudad del Tajo están sufriendo al no haber percibido la paga de este mes. La regidora se mostró categórica: “ La Junta no paga desde 2010”. La deuda con el Ayuntamiento alcanza la friolera de 1, 5 millones de euros. De esta situación adversa participan la mayor parte de los ayuntamientos de la comarca serrana, con los cuales se ha entrado en contacto para, unidos, efectuar conjuntamente la pertinente reclamación.
Tal y como están las cosas no cabe ser optimistas. La entidad autónoma es más que probable que haga recaer la culpa en el Gobierno central. Y así, como dicen por aquí, entre todos la mataron y ella sola se murió.