El proyecto de construcción de una gran superficie comercial en Ronda de la firma Eroski, lejos de tener toda su tramitación finalizada, todavía tiene que salvar una gran dificultad urbanística para que pueda convertirse en una realidad. En concreto, la empresa promotora debe obtener de la Junta de Andalucía la calificación comercial para los terrenos del viejo recinto ferial, que ha sido la parcela que finalmente se ha elegido para levantar la gran superficie comercial. Este hecho implica que en estos momentos ese suelo no cuenta con la calificación necesaria para poder abrir comercios, lo que supondría la imposibilidad de ejecutar el proyecto si la Junta de Andalucía no autoriza este cambio de uso, como ya hizo con los terrenos del viejo campo de fútbol.
En este sentido, fuentes de la delegación municipal de Urbanismo han confirmado este hecho, asegurando que en estos momentos se está procediendo a la finalización urbanística del proyecto, lo que, traducido, significa que la empresa está tratando de obtener del Gobierno andaluz ese cambio de uso.
Las mismas fuentes califican como “una milonga más” del anterior equipo de gobierno el hecho de que hasta el momento se hubiese dado como finalizado el proceso administrativo del proyecto, lo que supondría, en teoría, contar con todos los permisos y autorizaciones necesarias para la ejecución de una superficie comercial que se anunció como una de las mayores de Andalucía y que estaba previsto que ocupara los terrenos del viejo recinto ferial y del antiguo campo de fútbol, algo que ahora se ha reducido a la mitad.
Esta circunstancia hace que el proyecto de la gran superficie, que fuentes municipales aseguran que se estaría diseñado, no pueda ser presentando ante el Consistorio, ya que, de hacerse, el Ayuntamiento se vería en la obligación de rechazarlo y no autorizar las obras, dada la imposibilidad de contar con viabilidad en la ficha urbanística que actualmente tiene la zona.
En este sentido, el delegado municipal de Urbanismo, Daniel Harillo, mostró su confianza en que la Junta de Andalucía no ponga problemas al cambio de uso, ya que “no hay ningún motivo para negarse”.
Harillo, también afirmó que “se había vendido una película que no era real”, en alusión a la falta de autorización sobre esta parcela, un hecho que afirma que conocía el anterior equipo de gobierno y del que eran “conscientes” cuando se acordó la recompra de los terrenos ocupados por el viejo campo de fútbol. “Nosotros hemos tratado de reconducir y encauzar todo este asunto”, dijo Harillo.
La decisión de abandonar la parcela del viejo campo de fútbol supone volver a la anterior idea sobre este proyecto, que llegó a contar con un diseño sobre los terrenos del viejo Real. Además, con esta maniobra los promotores se desprenden de un terreno sobre el que se habían planteado dudas sobre el posible incumplimiento del convenio de compra que se firmó con el Ayuntamiento de Ronda, además de ser uno de los focos de la investigación del caso Acinipo sobre presunta corrupción urbanística.
Diodoro
Daniel, está tan obsesionado con la «traición» de los ex-andalucistas y les profesa tal odio, que sólo mira hacia atrás y no se da cuenta de la nula labor que él mismo está haciendo por Ronda. ¡Mira hacia adelante y despierta de una vez, que se te va el tiempo… y a Ronda también!