Otro escándalo en el Pleno: el Tripartito abandona la sesión entre abucheos y gritos de «¡Fuera, fuera! y ¡Sinvergüenzas!»

Pleno ordinario el que se celebró en la noche del pasado lunes en el Ayuntamiento de Ronda y nuevo escándalo.

Los concejales del equipo de Gobierno Tripartito (PSOE, PA e IU), abandonaron la sesión entre abucheos y gritos de ¡Fuera, fuera! y ¡Sinvergüenzas!, que les lanzaron los más de cincuenta vecinos que acudieron al Pleno, para mostrar su rechazo al corte del Puente Nuevo que se ha establecido por parte del Ayuntamiento.

Al finalizar la sesión, y en el apartado de ruegos y preguntas del público, varias vecinas y vecinos afectados por esta regulación intervinieron para reclamar al Tripartito que de marcha atrás, hasta tanto se realice un vial alternativo que evite su aislamiento.

“No somos violentos, somos ciudadanos pacíficos que venimos a reclamar algo justo con nuestra palabra”, dijo una vecina y madre que mostró una fotografía tomada por este periódico en un pleno anterior, cuando era escoltada por dos policías locales para que abandonara la sesión tras la orden que dio la alcaldesa de desalojo del salón.

Otro de los vecinos les dijo que “Ronda no necesita políticos becarios, necesita políticos preparados que luchen por su ciudad y por sus ciudadanos”.

También tomó la palabra el portavoz de la Plataforma de Afectados por el Corte del Puente Nuevo, Martín Guerrero, quien pidió explicaciones en relación a que por qué se ha establecido esta regulación de tráfico sin que estuviese registrado debidamente el decreto de la Alcaldía que lo autorizaba. También cuestionó a la concejal de Trafio, Paqui González (IU) por acusar a la plataforma de manipular y de mentir a los vecinos.

Por otra parte, el presidente de la Asociación de Vecinos, Juan Manuel Ayala, quien dijo, con datos y nombres, que la mesa de trabajo que se creó para perfilar el estudio de movilidad sostenible en el casco histórico estaba formada, en su mayoría, por concejales del Tripartito, funcionarios municipales y personas afines al corte del Puente Nuevo.

Así las cosas, y tras terminar estas exposiciones, la alcaldesa, la socialista Teresa Valdenebro, dio por cerrado el Pleno sin responder a ninguna de estas cuestiones.

Ello provocó una gran indignación de los vecinos, que empezaron a abuchear a los concejales del Tripartito, que abandonaron la sesión por un “pasillo de la vergüenza” y con las cabezas agachadas, según destacaron algunos de los presentes.

Mientras, como muestra de solidaridad con los vecinos afectados, todos los concejales del PP y de APR permanecieron en sus asientos, hasta que se despejó el salón de plenos.

Sin apenas temas de interés

A pesar de que el Pleno duró algo más de tres horas y media, una vez más apenas si se discutieron temas de interés para la ciudad. Eso sí, el Tripartito aprovechó la sesión para establecer una subida generalizada en el recibo del agua de un 2,7%, correspondiente a los IPC de 2016 y 2017.

En un pleno anterior el concejal de Hacienda, Álvaro Carreño (IU), anunció que se establecería una bonificación para que los rondeños no tuvieran que pagar ese incremento en las tarifas. Pero de eso no se habló nada, se subió el recibo sin que, de momento, se hayan aprobado bonificaciones.

También se aprobó el cambio de uso de unos terrenos de la Cruz de San Jorge, con el fin de poder autorizar la implantación de un supermercado Lidl, modificando el Plan Parcial de esa urbanización.

El Punto fue aprobado por todos los partidos, aunque desde el PP se le preguntó al concejal de Obras, el socialista Paco Márquez, cuál era el motivo del cambio de opinión del PSOE, ya que en un Pleno de 2013 se abstuvo en este asunto. A ello Márquez respondió que “lo que ha cambiado es que ahora yo soy el concejal de Urbanismo”.