La mayoría que ostentan Partido Popular y Partido Andalucista en el Pleno del Ayuntamiento de Ronda dio luz verde a la compra de los terrenos del viejo campo de fútbol, que fue vendido durante el pasado mandato a la empresa Ronda Gestión de Proyectos comerciales mediante concurso público. La operación de tesorería contó con el rechazo frontal de IU, que acusó al gobierno municipal de ceder ante las exigencias de un promotor privado, y la abstención del grupo socialista, aunque desde las filas del PSOE también se lanzaron duras críticas y se acusó a los actuales responsables municipales de comprar un «boquete», en alusión a la excavación existente en la actualidad en lo que fue el terreno de juego.
Precisamente, la utilización de esta definición por parte de la portavoz socialista, Teresa Valdenebro, le valía al portavoz del PP, Jesús Vázquez, para recordar que dicho «boquete» se realizó bajo mandato de un gobierno del PSOE en la ciudad.
Para hacer viable la recuperación de los terrenos ha sido necesario aprobar una modificación de crédito por valor de 3 millones de euros. Una anotación negativa que pasará a formar parte de los presupuestos municipales de 2012 y que hará referencia a las cantidades que el Consistorio dejará de ingresar. No obstante, el Ayuntamiento no tendrá que realizar ningún desembolso económico, aunque sí dejará de percibir los importes de las futuras licencias de obras para la construcción del futuro centro comercial. Tampoco recibirá las 550 plazas de aparcamiento previstas, que han sido valoradas en casi 6 millones de euros. Por otra parte, conservará los terrenos cedidos por la empresa promotora junto a la urbanización Olivar de las Monjas, entregados como pago en especie, y que no pueden ser devueltos al estar considerados como servicios generales. De este modo se alcanza un montante de la operación que supera los 10 millones de euros.
Mientras tanto, el delegado municipal de Urbanismo, Daniel Harillo, defendía la operación como modo para «salvar» la inversión que posibilitará que Ronda cuente con su primer centro comercial cerrado, aunque reducirá de forma considerable sus dimensiones, volviendo a las medidas que se anunciaron en un primer momento. De este modo pasará a ocupar únicamente los terrenos del viejo recinto ferial. Además, defendió también la necesidad de adecuar el proyecto para posibilitar la creación de puestos de trabajo.
