Si usted pretende realizar alguna gestión en el Ayuntamiento de Ronda a partir de las doce del medio día, mejor que lo deje para otra ocasión, ya que tendrá un gran problema a la hora de poder ver cumplido su propósito: y es que no hay donde aparcar.
Con la nueva regulación de aparcamientos en la plaza Duquesa de Parcent que ha establecido la Concejalía de Tráfico, que dirige la edil Paqui González (IU), ya no se puede parar durante un periodo de veinte minutos en la zona de carga y descarga para realizar estas gestiones.
Ahora los usuarios son redirigidos al interior del parking El Castillo, donde pueden estacionar sus vehículos durante 59 minutos de forma gratuita para solicitar un certificado de empadronamiento, una licencia de obra, o cualquier tipo de documentación.
¿Pero cuál es el problema?, pues que a partir de las 12.00 horas este aparcamiento se colapsa con la entrada de turistas, rondeños, clientes de hoteles, funcionarios municipales, concejales y residentes. A partir de ese momento ya no hay plazas libres, con lo que los empleados del aparcamiento ponen el cartel de ‘Parking completo’, con lo que la única opción que le queda al pobre contribuyente es irse por donde ha venido, sin poder realizar la gestión que tenía en mente, y que en algunos casos podría ser hasta muy urgente.
Son las cosas que pasa con este equipo de Gobierno Tripartito (PSOE, PA e IU), que primero dispara y después pregunta. Hoy un ciudadano comentaba indignado: «éstos se han especializado en crear problemas donde no los hay».
Hay que recordar que esta regulación también está impidiendo que los repartidores puedan realizar su trabajo de abastecer a los establecimientos de la zona, ya que a partir de las 12.00 horas no pueden llevar a cabo la carga y descarga. Precisamente es en ese momento, las 12.00, cuando los bares y restaurantes abren las puertas. Así piensa nuestro Gobierno local en los trabajadores rondeños.
Eso sí, los concejales tienen reservados sus aparcamientos en El Castillo, y a la sombra. Que no pasen calor nuestros ilustrísimos.
