El Consorcio Provincial de Bomberos ha detectado una serie de deficiencias en las medidas de seguridad que ofrece el nuevo Hospital Comarcal, tras la reciente inspección que realizó un técnico de esta unidad a las instalaciones sanitarias.
Por ello se ha requerido al Servicio Andaluz de Salud (SAS), que estas deficiencias sean solventadas en los próximos días para poder dar el visto bueno a este recinto, ya que el informe positivo de los bomberos es preceptivo para poder abrir el nuevo Hospital Comarcal. Concretamente, para el próximo jueves está previsto que este técnico se desplace de nuevo a Ronda para realizar otra inspección.
Parte de las deficiencias localizadas en la primera visita se centran en los problemas que podrían plantearse en caso de incendio y de que fuese necesario evacuar el hospital de forma rápida. La primera hace referencia a que las puertas de sectorización (de emergencia) deben disponer de una placa en la que se indique la estabilidad al fuego y su homologación. Igualmente los bomberos se han interesado por la ubicación del ascensor de emergencias (en caso de que el edificio por su estructura lo requiera).
También se ha informado al SAS que hay modificaciones en la construcción que no aparecen reflejadas en el proyecto inicial y que podrían cambiar las condiciones del edificio, señalando como ejemplo los espacios de la cocina o las zonas de esterilización.
Otro de los apartados que presenta dudas a los bomberos es que hay estructuras metálicas sobre las que no se ha podido comprobar su estabilidad al fuego, ya que se encuentran insertadas dentro de la misma obra.
En cuanto a las escaleras protegidas se observa que existe falta de ventilación, y que hay ventanas que no cumplen con la superficie mínima que exige la normativa de seguridad. Además, algunas plantas en las que desembocan las escaleras protegidas se encuentran abiertas, por lo que no se podrían considerar como protegidas.
De igual forma se plantean dudas sobre la estabilidad e integridad en caso de fuego de los ventanales cerrados que comunican con el sector principal del edificio, ya que debe estar certificado que tanto los cristales como el marco están diseñados para soportar las llamas.
Por último se señala que no existe sistema de detección en los locales de riesgo de las plantas superiores, siendo obligatoria su instalación.
Ante esta situación, desde el Área Sanitaria Serranía de Ronda se ha informado a Diario Ronda que la inspección realizada por el técnico del Consorcio Provincial de Bomberos “es una visita normal” y que se trata de los “trámites normales que hay que acometer ante la apertura de un nuevo edificio”.
Lo cierto es que hasta que no se solventen estas deficiencias y se emita el informe positivo por parte de los bomberos, las instalaciones no pueden entrar en funcionamiento, por lo que ello podría impedir que a finales de este mes de noviembre puedan iniciar su actividad algunos departamentos de las Consultas Externas, como se ha venido comentando durante los últimos días.