Este otoño los pequeños pitufos de Júzcar tienen más difícil el poderse resguardar bajo una seta en las frías noches de este mes de noviembre, ya que las escasas lluvias que se han registrado en lo que va de temporada no han propiciado la abundante aparición de este tipo de hongos, que son muy buscados por los aficionados de la buena mesa.
Esta circunstancia se pudo constatar este pasado fin de semana en Júzcar, que un año más celebró sus tradicionales Jornadas Micológicas (cumplían su décima edición) y en las que participaron más de 150 personas llegadas desde todos los rincones de España.
Los asistentes a las jornadas micológicas se dividieron en tres grupos y peinaron los bosques próximos al ‘Pueblo Pitufo’ en busca de las preciadas setas, sobre todo la llamada ‘yema de huevo’, una de las variedades que crece en la zona y que supone todo un manjar.
En otras ediciones, en las que las lluvias de semanas anteriores habían hecho que brotasen setas por todas partes, se llegaron a recoger hasta 200 variedades distintas.
No obstante, desde el Ayuntamiento de Júzcar, que organiza estas jornadas y que ofrece consejos para actuar con seguridad, se recuerda que únicamente hay que recoger del campo las que se conozcan con total certeza, ya que ingerir algunas de las peligrosas puede costar muy caro.
Este año, a pesar de la escasez, algunos aficionados llegaron a recoger ejemplares de gran tamaño y vistosidad.
Para finalizar la actividad, el domingo, se organizó una jornada gastronómica se setas y se ofreció una interesante exposición con todas las capturas realizadas.
