La iglesia de Santa Cecilia registró un lleno absoluto para celebrar la festividad de la Virgen del Pilar, patrona de la Guardia Civil.
Numerosas autoridades civiles y militantes se acercaron a este céntrico templo para acompañar a los agentes en esta celebración, donde hubo un recuerdo para todos aquellos agentes que han perdido la vida en acto de servicio.
Una vez finalizada la celebración eucarística, donde hubo presencia de mujeres ataviadas con la tradicional mantilla, de riguroso negro, se inició la celebración en las instalaciones del cuartel de nuestra localidad.
Era la primera ocasión en la que el nuevo capitán de la Guardia Civil estaba al frente de estos actos, tras la jubilación de Emeterio Marcos, que no faltó al evento, tanto religioso como de celebración en el acuartelamiento.
Durante el acto se entregaron diversos recuerdos y se destacó el trabajo de los agentes, que desarrollan su trabajo en una de las zonas de España que presentan un menor índice de delincuencia de todo el país.
Mientras tanto, el alcalde la ciudad, Antonio Marín, destacó la labor que realiza este cuerpo para que los índices de delincuencia en nuestra comarca sean tan bajos, al tiempo que les animaba a seguir en el mismo camino.