El documento analizado confirma algunas de las líneas más importantes del planeamiento, que fueron adelantadas por este periódico, y que consisten en la eliminación del paraje conocido como el ‘Albercón’ de las previsiones de suelo urbanizable. Ahora se apuesta por desarrollar la ciudad junto al actual casco urbano, ampliando la zona urbanizable hacia los terrenos del actual polígono industrial ‘El Fuerte’ y sus alrededores. En esta zona se contará con una densidad de 45 viviendas por hectárea, siendo el punto que concentrará la mayoría de las 4.300 nuevas viviendas que se contemplará en el PGOU. A ellas se unirán pequeñas cuñas urbanizables en el Barrio de San Francisco y La Planilla.
Una de las principales novedades del documento es la inclusión del denominado centro de recepción de visitantes como parte del mismo, lo que vendría a darle un respaldo muy importante a este proyecto. Es este aspecto uno de los matices que ha despertados ciertas dudas en Izquierda Unida, que es partidaria de situar estar infraestructura junto a las cornisas del Tajo y próximo al barrio de San Francisco.
En cuanto a la actual situación del paso del ferrocarril por mitad del casco urbano, los redactores proponer el dotar de carácter urbano a parte de los terrenos que ocupa la estación de tren, lo que facilitaría al Ministerio de Fomento los fondos para compensar el soterramiento de las líneas del ferrocarril, quedando un gran bulevar en superficie.