Los datos sobre los accidentes de tráfico que se produjeron durante 2008 en el casco urbano de Ronda han arrojado un incremento del 4% de los siniestros en los que el alcohol ha tenido algún tipo de motivación, a pesar de que la Policía Local ha duplicado el número de controles de alcoholemia.
En total, han sido 257 los siniestros que se registraron durante el pasado año en las calles rondeñas, de los que 199 fueron vehículos de cuatro ruedas, mientras que en 45 se vieron implicados ciclomotores, con un 66% donde el suceso se saldó con algún herido.
A pesar de estas cifras, el pasado año registró un descenso de 50 accidentes con respecto a 2007. En cuanto a las denuncias realizadas por agentes de la Policía Local a lo largo del pasado año, ascienden a un total de 6.187, lo que supone 300 menos que durante 2007.
