La Policía Nacional trata de averiguar a quién corresponden los restos humanos que se han encontrado en un agujero natural del Puerto del Viento, una zona limítrofe entre Ronda y El Burgo, y que fueron hallados por un grupo de espeleólogos. De momento, todo hace indicar que efectivamente corresponden a una persona, aunque en un lugar cercano también se encontraban otros restos que parecen ser de un animal, según los primeros indicios.
Precisamente, este último aspecto también hace creer que podría tratarse de algún ganadero que pudo perder la vida en algún tipo de accidente mientras estaba con el ganado o trataba de recuperar uno de sus animales.
Otra de las hipótesis apuntaría a una posible muerte violenta por la presencia de un casquillo cerca del lugar dónde aparecieron los restos, aunque esta prueba tampoco se considera demasiado relevante, al tratarse de un paraje que protagonizó enfrentamientos durante la guerra civil española. Por ese motivo es habitual encontrar casquillos de muy diverso tipo y espoletas de detonación.
Por ello, ninguna de las principales hipótesis que se barajan se pueden dar por ciertas, por lo que tendrán que ser los análisis forenses los que traten de determinar las causas de la muerte. Además, la posible fecha de la muerte puede despejar algunas de las dudas iniciales. En este sentido, fuentes próximas a la investigación apuntaron a que los huesos podrían llevar en el paraje entre 30 y 40 años, aunque ser trataría de un cálculo muy inicial y muy complejo de realizar con la simple visión de los mismos.