La Casa de la Cultura de Ronda amaneció ayer complemente inundada. La causa pudo ser, según técnicos de la brigada de obras, un grifo que se quedó abierto en la segunda planta del edificio el pasado viernes, cuando hubo un corte de agua durante unos minutos. Este hecho hizo que nadie se apercibiera de la fuga de agua hasta la mañana del lunes, cuando los trabajadores se disponían a abrir las oficinas municipales allí ubicadas.
El edificio, que alberga la Biblioteca Municipal, no pudo ser abierto al público, y permanecerá cerrado al menos una semana, tiempo que los técnicos municipales han estimado suficiente para arreglar los desperfectos causados en todas las plantas. Aunque los daños han sido considerables, no han afectado a los volúmenes de la Biblioteca, como se temió en un principio.
Los bomberos se personaron con rapidez en el lugar, pero su intervención no fue necesaria porque el volumen del agua era insuficiente para que las bombas extractoras de agua funcionasen de manera efectiva, por lo que la extracción se ha realizado de forma manual por parte de los trabajadores, quienes también se afanaban en salvar todo el material y los papeles que pudieron.
