El PSOE rondeño sigue defendiendo las medidas tomadas por el Gobierno Central para recortar el gasto público. Mientras la pasada semana era el delegado de Economía, Rafael Lara, el que anunciaba que el Ayuntamiento adoptará el recorte de salarios para los funcionarios locales, esta semana era el secretario de organización, Francisco Calvente, el que calificaba esta medida como “obligatoria y necesaria para proteger a los ciudadanos frente a la crisis”.
Calvente, además, quiso responder a Rafael Ruiz, portavoz local de IU, que pedía una reducción del 10 % en el salario de todos los concejales y un recorte “drástico” en el número de cargos de confianza. “Ruiz se tira a la piscina vacía para confundir a los ciudadanos y polemizar, sin conocer las medidas”, indicó Calvente.
El secretario de organización criticó que precisamente fuera Rafael Ruiz el que hiciera estas exigencias: “No dice nada de su propio sueldo como cargo de confianza en la Diputación. Cobra en torno a los 3.500 euros al mes, más que el alcalde, así que tendría que ser él quien se rebajara no un 10, sino un 50 % su sueldo”.