Mbappé acaba de llegar al Real Madrid y el cuadro de la capital y actual campeón de Europa acaba de armar el que quizá sea el mejor equipo del planeta, muy a pesar de los culés que van a tener que ver como su acérrimo rival se lleva las miradas porque ellos no están, ni cerca, en buen momento.
Laporta ha dado bandazos en su mandato y deja muchas dudas al aficionado que no le tiene nada de esperanza a Hansi Flick que acaba de llegar a uno de los banquillos más calientes del mundo. La plantilla es limitada y el equipo con el ánimo por los suelos.
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¿El Barça puede competir? Es lo que vamos a ver, porque el equipo que armó el Madrid y varios rivales directos en Europa es preocupante para los culés que van a tener que sufrir con un nuevo proyecto.
Se comienza una vez mas
Con Xavi, aunque no se ganó nada la temporada pasada, se logró competir en el largo plazo y hasta se ganó una Liga, cosa que no pasaba desde la salida de Messi del plantel, que es el trauma más grande del equipo en su historia.
Con Mateu Alemany lograron construir un equipo casi a costo cero, cosa impresionante considerando las finanzas del club, que están en ruinas gracias a la pésima gestión de Josep Maria Bartomeu, que prácticamente quebró al club.
Xavi llegó sacrificando hasta su propio salario y logró hacer un equipo competitivo, pero después de una buena temporada, llegó una muy mala, que gracias a lesiones y bajo nivel de varios futbolistas, dejó al Barcelona con otro año en ceros.
Laporta decidió despedir a Xavi en una novela que ya todos conocemos y trajo a Hansi Flick, que en papel suena como una excelente idea, pero si vemos la plantilla del Barcelona, no lo es, porque ese equipo lo diseño Xavi para jugar como él quiere y no como el alemán desea.
Flick se tendrá que adaptar.
No es secreto que el alemán quería llegar al club sí o sí, porque era su sueño, pero también pidió contrataciones imposibles para la actual cartera blaugrana, que es nula. Laporta no podrá reforzar al equipo, y se tendrá que trabajar con lo que se tiene, que es muy poco.
Que no se malentienda, el equipo no es malo, pero muchos de sus referentes se están haciendo viejos, como Lewandowski o Gundogan y los jóvenes, que son una verdadera maravilla, no están lo suficientemente experimentados para darles el peso de un equipo al que le urge trascender.
Lo primero que hizo Flick fue cambiar a los servicios médicos del club, que han sido un desastre durante varias temporadas, y se ejemplifica claramente con el caso de Dembele que mágicamente salió del club y es uno de los mejores delanteros del mundo y Pedri que se la vive lesionado.
Flick quiere un equipo físico y agresivo, cosa que no es parte de la filosofía culé, y para esto necesita que los jugadores estén a punto físicamente, por eso trajo al doctor que trabajó con él en el Bayern Múnich, que convirtió al equipo en una máquina que ganó el sextete.
Es aquí donde se tendrá que adaptar, pues los jugadores no se pueden lesionar. Ninguno tiene un recambio natural y los jóvenes no pueden cargar al equipo que no se ve por donde le pueda competir el Real Madrid ¿Lo podrá hacer?
