El vicepresidente de Asaja Málaga, Miguel Ángel Reguera, y uno de los empleados de su finca, un vecino de Cuevas del Becerro, son las víctimas mortales del accidente de tráfico ocurrido en la noche de este pasado miércoles en la carretera del municipio malagueño de Cañete la Real.
Reguera, en su finca, El Parador de Santa María, mantenía una explotación de ganado vacuno, aunque él ya estaba jubilado y su hijo está al frente de la misma. La otra víctima, un hombre de unos 65 años, había trabajado toda la vida con él, según han confirmado a Europa Press.
Los dos iban en el mismo coche cuando éste se salió de la vía en torno a las 22.40 horas del miércoles y cayeron por un barranco en la A-367, la carretera de Campillos, pasando el cruce de Cuevas del Becerro, causando la muerte de ambos sin que los sanitarios pudieran hacer nada por salvar sus vidas.
La muerte de Reguera ha causado un gran pesar en Ronda. Aunque era natural de Sevilla, estaba afincado desde hace años en el municipio, desde donde ejercía un papel muy activo en defensa de los intereses de los agricultores y ganaderos locales. De hecho, también era presidente de la Agrupación de Defensa Sanitaria Ganadera en Ronda (ADSG).
Los que lo conocían lo recuerdan como un hombre «encantador, muy educado, correcto y cumplidor». «Ha sido una gran pérdida porque era una persona excepcional, un hombre excelente».
Su fallecimiento también ha caído como «un jarro de agua fría» en Cuevas del Becerro, donde tanto él como su empleado –vecino de toda al vida– eran muy conocidos, han asegurado a Europa Press desde el Ayuntamiento del municipio.