«Encima que tienes que esperar a que te den cita y desplazarte hasta el quinto pino para renovar el DNI, ahora resulta que también tienes que aguantar todo un infierno por el elevado calor que tienes que soportar dentro de la Comisaría», explicaba Juan Carlos a Diario Ronda, uno de los cientos de usuarios que pasan por esas dependencias a diario para realizar algún trámite.
Y es que durante estas jornadas, en las que las altas temperaturas están ronzando e incluso superando los 40 grados en Ronda, tanto los policías nacionales que allí prestan sus servicios como los propios usuarios que acuden a las dependencias de la Comisaría provisional, tienen que soportar, como pueden un intenso calor debido a que esas dependencias públicas están situadas en una antigua nave industrial de Olivar de las Monjas, que en ningún momento fue diseñada para paliar los rigores del verano.
«El sol entra por las enormes cristaleras que han puesto, el techo es de chapa metálica y además los aparatos de aire acondicionado que existen son pocos e ineficaces para refrescar el ambiente en toda la nave. Ello hace que sea un lugar muy poco confortable para pasar el verano», comentan algunos de los policías destinados en Ronda.
Toda esta situación, en parte, viene motivada porque el Ministerio del Interior tiene paralizada desde hace tres meses las obras de remodelación de la nueva Comisaría de la Policía Nacional de Ronda, situadas en la avenida de Málaga, que se iniciaron a finales del pasado mes de noviembre, sin dar ningún tipo de explicación.
Al preguntar al Gabinete de Comunicación de la Comisaría Provincial de Málaga de la Policía Nacional, nadie sabe dar una explicación sobre este retraso en las obras y por qué se están alargando tanto. Mientras tanto todas las gestiones de seguridad de la ciudad se siguen realizando en unas instalaciones que se pensaron solo para unos meses, ya que todo el mundo sabe que no están preparadas para la función que actualmente desempeñan.
Según ha podido conocer Diario Ronda, el motivo de esta paralización podría estar en algunas deficiencias que presenta el proyecto original que fue redactado por el Ministerio del Interior, que ahora tendría que corregirse en su totalidad, lo que podría retrasar de forma importante la realización de esta actuación que era demandada desde hace décadas por los ciudadanos.
Hay que recordar que desde el pasado mes de octubre los distintos servicios de la Policía Nacional se trasladaron de forma provisional a una nave industrial situada en la calle Río Tinto de El Fuerte, junto al Olivar de las Monjas. Unas instalaciones que ni siquiera cuentan con calabozos.
Es decir, que a la hora de hacer los planos para esta remodelación del edificio, con una inversión prevista por el Gobierno de Sánchez de 1,3 millones de euros, no analizaron debidamente el inmueble, con lo que ahora será necesario redactar un nuevo proyecto, contar con la liquidez necesaria, licitar las obras, ejecutarlas…, vamos, al menos un año más, y eso con mucha suerte.
Mientras tanto, los policías y rondeños a seguir pasando calor en verano, y frío en invierno, ya que este mismo problema se da al contrario cuando llegan las heladas a la ciudad del Tajo.
