Ronda Romántica arrancó en la tarde de este pasado viernes por todo lo alto, con un pasacalles en el que desfilaron cientos de personas llegadas desde casi una veintena de pueblos de la Serranía de Ronda e incluso de la Costa del Sol, que son miembros de las diferentes recreaciones históricas que están participando en esta fiesta tan singular.
La comitiva partió cuando empezaba a caer la tarde desde la barriada de la Sagrada Familia, en una columna multicolor, en la que se pudieron contemplar trajes de la época de los siglos XVIII y XIX, que recordaban la forma de vivir y de sentir de otros tiempos.
Los jinetes y amazonas abrieron el cortejo, en el que tocaron alegres marchas hasta cuatro bandas de música y charangas. La Corporación Municipal con la alcaldesa, Maripaz Fernández, a la cabeza, estaba en el inicio del pasacalles, donde también participaron las representaciones y recreaciones históricas de los pueblos que este año se han sumado una vez más a Ronda Romántica.
Tras recorrer el Puente Nuevo y llegar al Ruedo Alameda, en el barrio de San Francisco, el personal se repartió por las distintas estancias de época para disfrutar de la gastronomía serrana, tanto en este espacio tan singular, como en la plaza Duquesa de Parcent, el otro lugar elegido y de encanto.
Al mismo tiempo, también durante la noche, se pudieron contemplar algunas recreaciones históricas, así como un recital de flamenco, que fueron seguidos por numeroso público.
Este sábado, se espera otro día grande, con los mismos escenarios preparados para pasarlo bien, con los espectáculos de hípica, más recreaciones, cante y lo mejor de nuestra tierra en las estancias históricas.