Todo el equipo de ‘La Voz de Ronda’ les puede asegurar que escribir estas líneas nos llena de tanta ilusión, alegría, orgullo y felicidad que no podemos por más que compartirla con los verdaderos responsables de que a día de hoy este periódico pueda presumir de llevar un año contando la información de nuestra ciudad.
Nuestra intención no es, ni mucho menos, caer en los típicos y tópicos agradecimientos que suenan más a ejercicio de ‘engorde de autoestima’ que a otra cosa.
Si les decimos a nuestros lectores que nos eligen cada sábado para conocer que ocurre en su ciudad, a las empresas que han confiado en nosotros desde el primer día en estos tiempos difíciles para todos y a nuestros colaboradores que hacen de nuestra voz algo libre, independiente, objetivo y plural, que les damos las gracias no se lo tomen como algo banal. Se lo decimos desde lo más profundo de nuestro corazón porque les podemos asegurar que hemos vivido tantos momentos buenos gracias a ellos en estos doce meses que han conseguido que cualquier nubarrón (a veces tormenta) que haya podido acercarse se aleje rápidamente. Que tanto intento de zancadilla de los que sólo están movidos por la envidia de saber que nunca conseguirán el sello de independencia y veracidad que ustedes nos han otorgado en tan sólo un año, se haya quedado en el intento y nos haya hecho aún más fuertes. Siempre gracias a ustedes, porque es la fuerza que nos hace seguir adelante cada semana, que nos hace ilusionarnos en cada edición, que nos inyecta la suficiente energía para superarnos cada día y seguir intentando contar las cosas como son, sin disfraces, sin intereses ocultos, sin máscaras, luchando a veces contra vientos y mareas (algunas con nombres y apellidos por cierto) que sólo han conseguido multiplicar por infinito nuestro deseo de que este primer año sea sólo el inicio de un largo, muy largo camino con los rondeños. A todos, a los que nos apoyan y a los que no, a los que nos aconsejan y a los que nos critican, a los que nos atacan y a los que nos respetan, a todos muchas gracias. Y para todos el compromiso de continuar intentando ser una humilde voz que siga tomando el pulso a la ciudad que tanto queremos.