Ya han pasado más de 48 horas desde que el PP de Málaga, y posteriormente el parlamentario popular rondeño Daniel Castilla, pidiesen explicaciones a la también parlamentaria andaluza, y portavoz del Grupo Municipal Socialista, Isabel María Aguilera, y al candidato electoral de esta formación Francisco Cañestro, sobre cómo consiguieron sus puestos de trabajo fijos en el Servicio Andaluz de Empleo (SAE) y en el Patronato Provincial de Recaudación, y en todo este tiempo no han ofrecido ningún argumento sólido sobre las cuestiones que les han planteado.
Sobre todo en lo referente a si esos empleos los consiguieron por «enchufe», tal y como han dejado caer los populares, ya que de momento no existe ninguna información sobre si realizaron algún tipo de oposición o méritos para llegar a estos tan atractivos y bien remunerados puestos laborales.
Tanto Aguilera como Cañestro, en las declaraciones que han ofrecido a diferentes medios de comunicación únicamente se han centrado en enviar balones fuera, con frases tales como que es «un trapo rojo para desviar la atención de temas que verdaderamente preocupan a los ciudadanos», o que responde al “miedo que tiene el pésimo y mediocre Gobierno local de Maripaz Fernández a un candidato socialista fuerte, como Paco Cañestro, en la próxima contienda electoral”.
Pero en ningún momento han aclarado nada sobre la forma en la que accedieron a sus empleos: ninguna fecha, ningún examen, ningún currículum, ningún dato que pueda despejar las preguntas formuladas por los populares, por lo que sigue siendo muy turbio todo este asunto y, el dejarlo limpio, sólo depende de ellos; de que se pronuncien con luz y taquígrafo y que expliquen todo lo que tengan que explicar.
Si siguen callando, mal va la cosa, teniendo en cuenta que Aguilera es la secretaria de Empleo del PSOE de Andalucía que dirige Juan Espadas, y Francisco Cañestro, se presentará a las próximas elecciones que prometiendo que él es el valedor de la verdad, la igualdad de oportunidades para todos, y del futuro de Ronda. Para ello, antes deberían aclarar varias cuestiones a los rondeños, que aún siguen sin responder. Ellos mismos.
