El uso de la bicicleta en los países europeos ha cobrado gran importancia luego del tiempo de confinamiento debido a la Pandemia. Pero con esto, los beneficios que se han observado en la gente y su resistencia a retomar los transportes públicos o privados, han forzado a las grandes ciudades a trabajar en mejorar las condiciones para este tipo de movilidad.
El mercado sigue en aumento, y la entrada de nuevos actores al juego, como las bicicletas eléctricas, no ha hecho más que se mantenga como un nicho muy interesante, con bastantes beneficios en todos los ámbitos de la sociedad.
La parte de la salud de los individuos que la usan, los ha motivado a seguir haciéndolo, puesto que no sólo se trata de sentirse mejor, sino que también aporta en la consciencia colectiva ambiental que las principales ciudades de la UE han aprovechado.
El estilo de vida también es un fuerte aliciente para que este tipo de movilidad sea la preferida, donde se destacan situaciones tan simples como el que la gente aprecia más las bellas vistas de las ciudades, además de que se fijan más en la naturaleza.
Es así que destacan 2 ciudades que se han volcado en el uso de las bicicletas y de aportar una infraestructura apta y segura para este tipo de vehículos.
- Copenhague, la capital danesa, es la ciudad líder para andar en bicicleta, sea del tipo que sea, inyectando inversión en infraestructura que favorecen al 62% de los habitantes que utilizan la bici como medio de transporte diario.
El aumento en el tráfico de bicicletas ha aumentado hasta un 68%, por lo que la construcción de cuatro puentes y de infraestructura de ciclorutas, así como el mantenimiento y mejora de las ya existentes, la siguen colocando en el top y en una de las ciudades más amigables para hacerlo.
- Ámsterdam se coloca en segundo puesto, con una reconocida fama como una de las ciudades amigables con el uso de la bicicleta desde hace varios años.
El mejoramiento en estacionamientos, el confinamiento, la construcción de mayor y mejor infraestructura y los apoyos en incentivos para utilizar este medio de transporte, aportan alrededor de 11.000 nuevos ciclistas cada año.
Lo más importante, es el esfuerzo porque los corredores para estos vehículos de transporte, están diseñados para ofrecer menos estrés durante los trayectos en las horas pico. Esto se ha logrado aumentando las vías y rediseñando las intersecciones principales, además de más árboles y mejores entornos para caminar.
En cuanto a España, hay que destacar la labor del gobierno de Barcelona, que ha puesto un especial interés en que la infraestructura de las ciclorutas se modifique completamente.
El objetivo, es que más y más personas prefieran utilizar este medio de transporte, aportando, además de los beneficios en tránsito, salud y bienestar, un entorno en el que los mismos ciudadanos sean capaces de admirar la hermosa ciudad catalana.
Sin duda que Europa es la referencia en cuanto a la adopción de proyectos que apoyen la tendencia de las bicis, porque la gran diferencia, es que también es un estilo de vida elegido, en el que la aventura y la recreación forman parte importante del cambio de rutinas y tradiciones en el transporte.