El presidente de la Diputación de Málaga, Francisco Salado, ha propuesto crear alianzas para conseguir un gran Pacto por la Conectividad Total de la provincia, que garantice la igualdad de acceso a las telecomunicaciones y nuevas tecnologías en todo el territorio y que contribuya a la lucha contra la despoblación. Salado ha participado hoy en un foro nacional, impulsado por la institución provincial, bajo el lema ‘Málaga para mover España: innovación y tecnología, aliadas por el reto demográfico’
Junto al presidente de la Diputación, han participado en este encuentro -que ha sido moderado por la vicepresidenta responsable de la estrategia contra la despoblación, Natacha Rivas- el consejero de la Presidencia de la Junta de Andalucía, Elías Bendodo; la secretaria general de Innovación del Ministerio de Ciencia e Innovación, Teresa Riesgo; la presidenta de la Fundación I+E y de Hp España y Portugal, Helena Herrero; el director general de la Fundación I+E, Renato Del Bino; el presidente y consejero delegado de Alstom España, Leopoldo Maestu; el responsable de Estrategia, Relaciones Públicas, Marketing y Comunicación de Ericsson, Iván Rejón; el presidente de Pfizer, Sergio Rodríguez; y el director territorial de Caixabank en Andalucía Oriental y Murcia, Juan Ignacio Zafra.
En su intervención, Francisco Salado ha incidido en que la conexión digital es uno de los ejes para favorecer el bienestar y el desarrollo del medio rural. “Durante la pandemia -ha añadido- se ha evidenciado aún más la brecha digital existente entre lo rural y lo urbano, que no debe avanzar ni un milímetro más. Por eso, conseguir un gran Pacto por la Conectividad Total de nuestra provincia será uno de los pilares en el que se basará la lucha contra la despoblación en este mandato”.
Salado ha destacado que la Diputación de Málaga lleva ya dos años trabajando en una Estrategia Global de Lucha contra la despoblación, con diferentes líneas de actuación para combatir la brecha digital, fomentar la implantación de empresas en los municipios, crear focos de atracción turística y potenciar las empresas agroalimentarias, a menudo de origen familiar, de los pueblos.
“Hemos puesto ya en marcha distintas medidas -ha explicado- y, desde luego el mantenimiento y mejora de los servicios públicos básicos es primordial. Y ello lo vamos a hacer en coordinación con la Junta de Andalucía. Les hablo de la asistencia sanitaria y educativa, pero también del abastecimiento de agua, de la recogida y tratamiento de residuos y, muy especialmente, de la cobertura de telecomunicaciones”.
Paralelamente, se ha referido al Plan Vía-ble, que parte con 50 millones de euros en inversiones plurianuales para mejorar las conexiones directas por carretera entre los municipios y para reducir el tiempo de desplazamiento con los grandes centros de actividad y servicios, tanto públicos como privado”.
Lucha contra la exclusión financiera
Igualmente, ha resaltado que otra gran prioridad es la lucha contra la exclusión financiera y ha concretado medidas puestas en marcha por la Diputación como que todas las oficinas del Patronato de Recaudación Provincial dispongan de un datáfono para facilitar el pago de tributos mediante tarjeta bancaria. Además, se ha ofrecido a los ayuntamientos, especialmente a los que no tienen oficina bancaria en su término municipal, un datáfono para facilitar el pago de impuestos dependientes del Patronato, como son el IBI o el Impuesto sobre el Vehículo de Tracción Mecánica.
Así mismo, y en colaboración con la red de centros Guadalinfo, se van a llevar a cabo acciones formativas dirigidas a mayores para enseñar a hacer trámites bancarios y de pago de impuestos vía telemática. Y ha anunciado que próximamente se presentará una iniciativa piloto en dos municipios de la provincia.
En la misma línea, el presidente de la Diputación ha apuntado que se reclamará al Gobierno que revierta la desaparición de las oficinas de Correos y mejore el servicio en los municipios pequeños.
Diagnóstico sobre pérdida de población
Francisco Salado ha detallado que la institución provincial ha realizado un diagnóstico sobre la situación de la despoblación en la provincia que ha permitido fijar diferentes niveles de actuación según el riesgo existente. Para ello se han tenido en cuenta dos variables: por un lado, las demográficas, determinantes para saber qué municipios pierden población; y, por otro, algunos factores y equipamientos básicos que denotan carencias que podrían incidir en ese proceso de despoblación.
Tras el estudio, se han establecido tres niveles de emergencia poblacional. En el nivel rojo, el más grave por pérdida de población y servicios, se encuentran 21 municipios malagueños. En un nivel intermedio, el naranja, hay doce pueblos. Y en el nivel amarillo, el menos grave en proceso de despoblación, otra docena de poblaciones.
El análisis arroja que 45 municipios de los 103 que forman la provincia están sufriendo una pérdida de población desde hace 20 años, de los que la gran mayoría se concentra en zonas con problemas de comunicaciones por su compleja orografía, como son el Valle del Genal y la Alta Axarquía.
En concreto, hay seis localidades que han perdido más del 20 por ciento de su población desde el año 2000. Se trata de tres municipios del Valle del Genal (Jubrique ha perdido el 37% de su población, seguido por Genalguacil y Benarrabá), Canillas de Aceituno y Alfarnate, en la Alta Axarquía y Cañete la Real, en la comarca del Guadalteba.
En el diagnóstico se refleja también que hay 18 pueblos que han perdido entre un 10 y un 20% de su población desde el año 2000, y otros 19 que han perdido hasta el 10% de sus habitantes en la misma fecha.
Déficit de servicios bancarios y de correos
Además, en el diagnóstico realizado se ha analizado la oferta de servicios en esos municipios. Así, en la provincia hay 15 pueblos sin servicios bancarios, es decir, sin sucursal o cajero automático, y hay 25 localidades sin oficina de Correos.
Y en cuanto a infraestructuras viarias, 24 municipios del Valle del Genal y la Alta Axarquía tienen problemas de accesibilidad viaria.