Quien no haya oído hablar de las criptomonedas a día de hoy está tan desconectado del mundo como aquellos que todavía no conocen internet, si es que todavía queda alguno. En los últimos años estas monedas virtuales han alcanzado un nivel de popularidad entre la sociedad de todo el mundo muy elevado, lo que ha obligado a diferentes sectores empresariales a actuar en consecuencia.
Cada vez son más bancos los que permiten operar con criptodivisas, y desde sectores como la medicina o la educación se están diseñando y planteando cada vez más proyectos basados en la tecnología blockchain o cadena de bloques sobre la que se desarrollan. Esta tecnología, basada en la descentralización y en la confianza entre los usuarios, quienes pueden observar todas las operaciones del resto y así poder detectar cualquier intento de hackeo, ya es el objeto de estudio sobre el que giran varios másteres y posgrados de diversas universidades de carácter nacional e internacional. La principal ventaja de la cadena de bloques es su elevado nivel de seguridad, algo que han visto y aprovechado desde diferentes ámbitos, sobre todo desde el financiero y el del entretenimiento. En el sector del juego online, por ejemplo, la tecnología blockchain ha permitido el desarrollo de plataformas como CoinPoker, que garantizan la total seguridad de las operaciones de sus jugadores. Incluso los artistas urbanos se suman a esta nueva tecnología. Tal es el caso del muralista francés Pascal Boyart que en sus últimas obras ha incluido códigos QR con el objetivo de que cualquiera que aprecie sus creaciones realice una donación en Bitcoin. Gracias al empleo de la blockchain se eliminan los trámites con terceros y las posibles retenciones de dinero en forma de comisiones bancarias.
Pese a todo, aunque casi todo el mundo ha oído hablar de las critptomonedas y de la tecnología sobre la que se desarrollan, son muy pocos los que realmente entienden su funcionamiento. La complejidad de los términos y de los diferentes procesos informáticos que se dan para su gestión terminan convirtiéndose en un auténtico galimatías para personas que nada tienen que ver con el ámbito de la tecnología. Esta es sin duda la idea de partida sobre la que trabajaron los responsables de la Bitcoineta, una furgoneta que recorrerá diferentes puntos de la geografía argentina y, eventualmente, también de otras partes de América Latina con el objetivo de arrojar un poco de luz sobre los términos y funcionamientos más complejos de esta tecnología. Puesta en marcha por dos ONGs, Bitcoin Argentina y Bitcoin Latinoamérica, la Bitcoineta se posiciona como un proyecto sin ánimo de lucro que pretende crear un puente entre aquellas personas que conocen de primera mano este nuevo paradigma financiero y tecnológico y la población de diferentes estratos sociales. Ambas organizaciones compraron y equiparon esta furgoneta que cuenta además con una pantalla digital en la que se explicarán los conceptos más elementales de esta tecnología y en la que, a mayores, se proyectarán todo tipo de productos audiovisuales relacionados con el universo de las criptomonedas.
La Bitcoineta inició su viaje el pasado 1 de junio y estará rodando por tierras argentinas hasta finales del mes de julio. Durante este período visitará zonas muy diferentes entre sí como Chascomús, Tandil, Necochea, Villa Ventana, Junín o Tres Arrollos.
Por el momento no existe ninguna iniciativa de estas características en nuestro país pero teniendo en cuenta que esta tecnología es cada vez más empleada por los españoles no sería extraño que se organizase un proyecto similar. De darse el caso, Ronda se posicionaría como una buena candidata en la lisa de posibles paradas.
