Al menos cinco bares y pubs del centro de la ciudad han sido sancionados por el Ayuntamiento con una muta de 400 euros, al considerar que clientes de estos establecimientos se encontraban consumiendo bebidas en la vía pública, un hecho, que según afirman desde el Consistorio, está prohibido por las ordenanzas municipales.
Las denuncias se formularon por parte de agentes de la Policía Local sobre las 19.00 horas del pasado 24 de diciembre, cuando cientos de rondeños estaban celebrando en las calles las horas previas a la Nochebuena.
Según afirman los propietarios de los establecimientos que han sido sancionados, y que han mostrado su indignación y malestar por estas denuncias, afirman que en ningún momento los agentes de la Policía Local se dirigieron a ellos, y se limitaron a realizar algunas fotografías del ambiente que había en el exterior de los bares y pubs. Es más, las multas no se les notificaron hasta este martes día 27 de siembre.
En los boletines emitidos se especifica que las denuncias se han producido “por la venta o dispensación de bebidas por parte de los establecimientos de hostelería para su consumo fuera del establecimiento”, además, en al menos uno de ellos se indica en las observaciones que “dispensa bebidas fuera de las zonas anexas al lugar autorizado”.
Los empresarios afectados por esta actuación del Ayuntamiento han manifestado su profundo malestar por lo ocurrido, ya que consideran que en un día tan señalado como la Nochebuena es habitual que en Ronda cientos de personas salgan a la calle para celebrarlo. Además consideran que no existe ninguna constancia ni prueba de que todas las personas que estaban en las puertas de sus establecimientos fuesen clientes suyos, ya que “muchos de ellos acudieron con sus botellas y sus propias bebidas, que nosotros no dispensamos”. Igualmente afirman que ellos no tienen ninguna competencia legal, ni es su cometido, a la hora de impedir de que las personas se concentren libremente en las calles de Ronda.
Finalmente expresan no entender cómo “se actúa contra establecimientos legalmente establecidos, que cumplen con las normas de seguridad y de salud y que pagan sus impuestos, y sin embargo se permiten actividades nocivas para la juventud, como es el botellón”.
La concejal delegada de Seguridad, Paqui González (IU), tras ser preguntada sobre estas sanciones, ha dicho, únicamente, “no tengo constancia de ninguna queja”.
