Esta semana tenemos que hablar de nuevo de la bandera, del debate, a mi juicio, innecesario que se ha creado. Bueno, para ser precisa, que ha creado el PA sacando a la luz los trapos sucios con su socio de gobierno, el PP. Me refiero a un comunicado enviado a los medios de comunicación por el PA en el que el partido explica sus motivos para desvincularse del proyecto de crear una bandera en Ronda. Hace alusión a motivos sociales incidiendo en que los ciudadanos, con la crisis económica, no están para banderas, que hay otras prioridades… en definitiva, el mismo discurso (un poco más largo) que ya siguió el secretario general del PA en Ronda, Sergio Flores, en todos los medios de comunicación la semana pasada.
En este caso me gustaría dejar claro que me parece una somera tontería que se haya llegado a tal punto con el asunto de la bandera. Pero sobre todo el PA está en su pleno derecho de considerar necesaria o no la bandera, de compartir o no sus colores, símbolos, sus referencias históricas… Nadie discute eso, no es ningún tipo de ataque ni nada por el estilo. Lo que ocurre es que no hace falta ser muy tonto para darse cuenta de que algo está pasando, de que la salud del pacto entre PP y PA no es tan buena cuando se llega a este extremo y se rompe la comunicación con el asunto de la bandera.
Desde fuera, resulta incomprensible que el PA haya esperado a este punto para rechazar el proyecto. Lo podía haber hecho cuando se constituyó la comisión de expertos a la que se le encomendó diseñar bocetos para la bandera, podía haber presentado sus propuestas en la comisión si no estaba de acuerdo con las líneas en las que se estaba trabajando y discutir el asunto en casa… mil soluciones pero nunca airear los trapos sucios y echar en cara, por ejemplo, a tu socio de gobierno que no se haga una consulta popular para diseñar los presupuestos municipales y sí para elegir una bandera y al final del comunicado intentar arreglar la polémica proponiendo que lo ideal sería crear un escudo… ¿en qué quedamos?
El PA puede tener razón en este último aspecto pero no son las formas. De estas formas, de la inestabilidad en el Ayuntamiento, ya están cansados los ciudadanos, unas formas que recuerdan lejanamente a épocas anteriores.
A este paso vamos a llegar al verano hablando de la bandera que parece ser una excusa para, como se dice coloquialmente, ‘formar el taco’. Así que, en mi opinión, déjense de tonterías, ya que como ustedes mismos han dicho, hay otras prioridades.
